domingo, diciembre 30, 2007

Todos nos equivocamos menos ellos

La verdad es que hoy quería hablar de Heavy Metal. Es una buena época para los que nos gusta esa música: Que si Arturo Pérez-Reverte dice que está descubriendo cosas muy interesantes en sus canciones, que si una gótica ganó el Gran Hermano, que si Saratoga hacen unos conciertos apoteósicos (¡¡el de anoche fue la leche!!)... Pero no puede ser. Resulta que las noticias de hoy me obligan a hablar de otras cosas.
Porque supongo que sabéis que hace un rato se celebró en Madrid un "Acto en favor de la Familia Cristiana". Es decir, un evento en el que la jerarquía eclesiástica critica a todo aquél que no acepte sus ideas y, más particularmente, al Gobierno que lo permite.
A lo largo del acto se cuestionaron ciertas actuaciones del Gobierno, como la Ley de Matrimonios Homosexuales. En este caso considero que es algo particularmente grave: Al criticar esta ley no se reivindica un derecho, sino que se pide que otros ciudadanos no lo tengan (por cierto, sigo esperando que alguien me diga en qué ataca esa ley a las familias "tradicionales").
Sinceramente, todo este embrollo me parece llamativo. No comprendo por qué para reivindicar una manera de pensar es necesario insultar a los que piensan de manera diferente, que es, en definitiva, lo que se hizo esta mañana. El mensaje subyacente era claro: "Si no pensamos y actuamos como dice la Iglesia, estamos equivocados. La verdad sólo la tienen Ella".
¿Realmente la política del Gobierno perjudica a la Iglesia (sobre todo si recordamos que este Gobierno aumentó el porcentaje del IRPF que va a las arcas de la Iglesia de un 0,52 a un 0,7%, además de realizar ciertas concesiones en materia educativa)? ¿Realmente el dar derechos a un grupo de ciudadanos supone que los demás vean los suyos menoscabados? No lo creo.
Teniendo en cuenta que, a nivel europeo, la Iglesia española es la que más ayudas recibe por parte del Gobierno de su país, creo que la jerarquía debería considerar que no está bien este sistemático ataque al que somete al Ejecutivo.
¿Para cuando un Estado verdaderamente laico?

sábado, diciembre 22, 2007

España paralizada

Queridos lectores, ya me tenéis otra vez aquí. Con el invierno recién empezado, nos encontramos con un fin de semana en el que toda España se encuentra paralizada por algún motivo. Hoy, por la Lotería de Navidad (a mí tampoco me tocó nada), es decir, que hoy es el día de la salud, de "no me tocó nada, pero por lo menos tengo salud". Mañana será por el partido entre el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona.
Y de eso quería yo hablar. Del hecho de que mañana nadie va a pensar en nada que no sea ver a 22 millonarios corriendo por un campo. La verdad es que es llamativo. Con todas las cosas de las que hay que hablar, los problemas de los equipos de fútbol monopolizan la atención. Es más importante saber la vida de tal o cual jugador que conocer los problemas de nuestra sociedad. Se hace más caso a las palabras de cualquier futbolista analfabeto que a las de cualquier intelectual. Se dedica más tiempo en los informativos a hablar de la "actualidad de los equipos" (aunque no haya noticias reales que contar sobre ellos y sólo se hable de que fueron a entrenar) que a hablar de las demás noticias.
Y luego se arman unos debates entre los aficionados que llaman la atención. Que si tal futbolista no siente los colores, que si sólo les interesa el dinero... Y claro, así luego si un jugador se va a otro equipo se mosquean. Alguien me justificaba una vez que Figo era un vendido por irse a otro equipo... poco después, esa persona cambiaba de trabajo para cobrar más (y yo me pregunto, ¿había tanta diferencia entre uno y otro?).
La verdad, me molesta mucho ver la cobertura mediática que reciben los futbolistas, pero sobre todo me molesta su arrogancia. Su convicción de que son mejores que los demás. Como cuando Raúl exigió a un policía que llamara al alcalde de Madrid para que él pudiera subirse a la Cibeles a celebrar un título (por la tele no se le vio decir "tú no sabes quién soy yo", pero casi apostaría a que lo dijo). Evidentemente, el policía no le hizo ni puñetero caso, pero la pena es que tampoco le dijo algo así como "¿Me subo yo a la mesa de tu comedor a bailar bakalao? ¿Pues por qué tienes que subirte tú a la estatua, imbécil?".
También me resulta sorprendente la chulería con la que los futbolistas de la selección van a participar en los campeonatos. Van en plan "nos los vamos a comer sin pelar", y al final acaban cayendo en cuartos (con suerte), eso sí, sin que el seleccionador se plantee ni de lejos dimitir o algo parecido.
No me entendáis mal, no me parece mal que exista el fútbol ni nada por el estilo. De hecho, ciertos partidos me parecen una excusa perfecta para quedar con los colegas para tomar unas cervezas. Lo que me parece mal es que se le dé tanta importancia, que hubiera momentos en los que nos intentasen convencer de que era de "interés general" (¿os acordáis?), o que cuando un equipo no puede hacer frente a sus deudas, los poderes públicos los financien (que digo yo que si son sociedades anónimas, deberían serlo para todo, ¿no?).
Pero claro... cuando veo gente que celebra las victorias de los equipos (y no siempre de los equipos de su ciudad), me asalta la misma duda: ¿Cobrarán algo de la prima que cobran los futbolistas o sólo es que son unos primos?.
Espero encontrar algún día la respuesta.
Felices fiestas.

lunes, diciembre 17, 2007

Vivan las "caenas"

Dice el informe PISA que los estudiantes españoles no entienden lo que leen. Probablemente sea verdad. Pero yo creo que el problema no es sólo que no entiendan lo que leen, sino que eso repercute en que no sean capaces de hacer una valoración crítica de aquello que están leyendo. No sé, a lo mejor todavía soy lo bastante joven como para creer en ciertas cosas, pero como (proyecto de) profesor que soy, considero que, por encima de que los alumnos aprendan cuatro nombres y cuatro fechas, lo más importante que tendrían que aprender es a pensar por sí mismos y a tener cierto sentido crítico de cara a entender, no sólo lo que leen, sino todo lo que se desarrolla a su alrededor.
Esto viene porque últimamente se están viendo en la política nacional ejemplos de falta de sentido crítico. Uno de ellos es el caso del alcalde de Totana y su implicación en un caso de corrupción. Sí, porque resulta que detuvieron al fulano por andar trincando lo que no debe, y la gente en lugar de ir a la puerta de la cárcel para cagarse en la madre que lo parió por robar de las arcas públicas y por traicionar la confianza de sus votantes, se manifiestan para darle su apoyo y para insultar al Gobierno, porque claro, todo lo que no beneficia a ciertos partidos, es culpa del Gobierno. No voy a entrar ahora en qué partido tiene más casos de corrupción abiertos (todos sabemos cuál es), pero creo que es necesario, por aquello de la salud democrática, que sepamos ser críticos con nuestros gobernantes y exigirles que no nos roben, independientemente del partido al que pertenezcan. Pero no, resulta que hay gente que está dispuesta a aceptar que sus gobernantes roben y a apoyarles pese a todo, como cuando se gritaba antaño aquello de "Viva mi dueño" o de "Vivan las 'caenas' "
Otro ejemplo, pero no de falta de sentido crítico sino de deseo de que ese sentido crítico no exista, lo vemos todos los días cuando Acebes habla a la ciudadanía pensando que todos somos imbéciles. Sí, cuando habla de que este Gobierno negocia con ETA (y digo yo, ¿si se negociara con ETA, habría atentados? pensad en ello), olvidando que el suyo sí que lo hizo y sí que concedió beneficios penitenciarios a etarras (¿os suena el nombre de Juan Priede? lo mató un etarra que había salido de la cárcel con una redención de condena firmada por Mayor Oreja). Todo eso significa que Acebes piensa que todos somos gilipollas y no nos enteramos de que nos intenta vender la moto de mala manera. Y que cree que, por mucho que nos mienta, seguiremos aceptando lo que dicen él y sus acólitos.
En fin... qué falta de decencia.

Ah, otra cosa... ¿Habéis leído el último artículo de Arturo Pérez-Reverte? Pues hacedlo. Es una pasada.

miércoles, diciembre 05, 2007

Un poco de literatura.

Hace un mes o poco más estaba yo con una de vosotros en la Biblioteca Jovellanos, y entonces ella me preguntó (tú me preguntaste) qué libro le recomendaba. Me quedé cortado y salí de la situación como pude. Entonces me paré a pensar. Es relativamente fácil recomendar alguno de esos libros que, supuestamente, todos deberíamos leer antes de morir, y entonces a todos se nos llena la boca recomendando Don Quijote o la Iliada o Fausto, que son libros estupendos pero que, normalmente, se dejan para cuando haya más tiempo. Sin embargo, muchas menos veces no nos paramos a pensar en esos libros que podríamos leer aquí y ahora, que podemos leer en los ratos libres que nuestras obligaciones nos dejan. Por eso, hoy me gustaría hacer una breve lista de libros, algunos bastante recientes, que se pueden leer ahora, sin necesidad de esperar a tener más tiempo para dedicarles. Esto significa que, si a alguno de vosotros no le interesa este tema, puede perfectamente dejar de leer y esperar a mi próximo texto.

Me resulta muy fácil recomendaros cualquier libro de Gabriel García Márquez. Todos sabéis que es mi escritor favorito. Pero si os tuviera que recomendar algún libro, evidentemente, sería el mejor: Cien años de soledad. Sin embargo, tal vez sea un tanto denso, así que os recomiendo Crónica de una muerte anunciada, o el más reciente, Memoria de mis putas tristes. Los dos son muy breves, y son una buena manera de disfrutar con la prosa del maestro.

Siguiendo con mi escritores de cabecera, debería recomendaros algo de José Saramago. Muchos decís que es demasiado complicado, pero creo que si leéis El Evangelio según Jesucristo o El hombre duplicado, podéis cambiar de idea. Las intermitencias de la muerte también es muy recomendable.

Umberto Eco es otro de mis escritores preferidos. Sin duda, el libro que resulta más interesante es El nombre de la rosa, libro sobre el que, además, se hizo una película que está muy bien. Otro libro suyo que también es muy bueno es Baudolino.

Arturo Pérez-Reverte es otro autor que me gusta bastante, aunque debo reconocer que me gustaba más de lo que me gusta. No voy a recomendaros lo que está de moda, los libros de la serie del Capitán Alatriste (que, desde mi punto de vista, son sus libros más flojos), sino que voy a recomendaros las que, seguramente, sean sus mejores novelas: El club Dumas (sobre el que se hizo una película bastante prescindible, La novena puerta), La piel del tambor (cuyos personajes inspiraron a los protagonistas de la desafortunada serie de televisión Quart) y El pintor de batallas, sin duda una de sus novelas más duras (uno de vosotros me decía una vez que, seguramente, fuera la novela que escribió para no suicidarse). Algunas de sus novelas cortas también son muy interesantes, como la divertidísima La sombra del águila y la espléndida El húsar, más interesante si cabe porque es la primera novela que escribió. Ambos relatos se encuentran recopilados, junto con otro par más en Obra breve.

Debo reconocer que Mario Vargas Llosa es un tipo que me cae bastante gordo, aunque nunca tuve demasiado claro el motivo. Sin embargo, sus tres novelas más recientes son interesantísimas. Se trata de Travesuras de la niña mala (genial, gracias por recomendármela Pedro), El Paraíso en la otra esquina (muy buena) y la durísima La fiesta del Chivo. Cualquiera de ella me parece estupenda.

Un autor poco conocido pero al que vale la pena acercarse es el antropólogo Nigel Barley. Este tío, recién terminada la carrera, se largó a estudiar a un pueblo perdido en mitad de África. En su libro El antropólogo inocente, a medio camino entre la novela, el diario y el libro de viajes, nos cuenta sus desventuras por esos mundos, desventuras debidas a su falta de experiencia, a una cierta torpeza y a grandes dosis de mala suerte.

George Orwell, que luchó en la Guerra Civil española como voluntario de las Brigadas Internacionales, nos dejó un par de novelas también muy interesantes. Una se titula 1984, y es la novela en la que aparece la figura del Gran Hermano. Pero la que más me gusta no es ésa, es Rebelión en la granja, una crítica acerada y muy divertida contra el stalinismo, con más valor porque está hecha por un comunista, es decir, por alguien que, supuestamente, debería apoyar esa dictadura.

Ahora vamos a fijarnos en cosas un poco más antiguas. En mi infancia (y también después) disfruté mucho con los libros que Arthur Conan Doyle escribió sobre el detective Sherlock Holmes. La ventaja de estos textos es que la mayoría son relatos cortos, y las novelas tampoco son demasiado largas. Si tenéis oportunidad, echad mano de un mastodóntico libro de más de mil páginas titulado Todo Sherlock Holmes, editado en el 2003, y en el que se recogen todos (repito, todos) los relatos y novelas que Doyle escribió sobre Holmes y en el que, además, hay un interesante estudio preliminar. Pero si sólo queréis tener un breve contacto con el detective, leed Estudio en escarlata, que es la novela corta en la que el personaje de Holmes es "presentado en sociedad". En ese libro, Holmes conoce al que acabará siendo su mejor amigo y también su biógrafo, el doctor Watson.
Además, sobre Holmes escribieron una gran cantidad de libros otros autores diferentes de Arthur Conan Doyle, empezando por su hijo Adrian. Si os interesa conocer la visión del personaje que tienen otros escritores, os recomiendo una recopilación bastante interesante que hicieron Isaac Asimov y otros, titulada Sherlock Holmes a través del tiempo y el espacio. En ella se incluyen relatos muy entretenidos y divertidos. Cuando yo la leí, la saqué de la Biblioteca Jovellanos; sin embargo, según la base de datos que pulula por internet, ese libro ya no está allí (de vosotros depende fiaros o no).

Otro escritor del XIX bastante interesante es, sin duda, Edgar Allan Poe. Sus relatos cortos son geniales, aunque debo reconocer que conozco poco su faceta como poeta. El "problema" con Poe es que siempre sabe a poco, siempre apetece leer otro relato más.

Sin salirnos de ese siglo, tenemos ahí a Alejandro Dumas. Desde luego, su mejor novela es El conde de Montecristo, pero ése es otro libro de ésos que dejamos para cuando haya más tiempo. Si os interesa conocer lo más famoso de su obra, echadle una ojeada a Los tres mosqueteros, aunque sé que es un libro que resulta más interesante cuando somos más jóvenes.

Para terminar, os voy a recomendar uno de mis libros favoritos: El retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde, libro cuyo argumento se puede resumir diciendo que es la historia del chaval que vende su alma al diablo para no envejecer. Es genial, creo que es la novela que os recomiendo de manera más encarecida.

Con esto termino. Espero que los disfrutéis. Sé que faltan muchos libros por citar (¿dónde están nuestros monstruos favoritos, Drácula y Frankestein? ¿o aquel pendón, excesivamente joven, llamado Lolita?), pero el texto ya era demasiado largo. Otra vez será.
Ah, y que nadie me diga eso de que "si hay película, para qué voy a leer el libro".

Por cierto, ya que hablamos de libros. Resulta que Victor Manuel sacó un libro, titulado Vivir para cantarlo, en el que se recopilan todas las letras que escribió, incluyendo la polémica letra que dedicó en 1966 a Franco. Dijo en una entrevista que la incluía porque le resultaba muy fácil explicar a sus fans por qué la incluía, mientras que si no la hubiera incluido le habría resultado más difícil explicar el motivo a la ultraderecha. No dijo a quién se refería cuando hablaba de ultraderecha, pero todos sabemos a quiénes dirigía sus palabras. A ésos que, para que no se les note todo lo que esconden, dicen que son los demás los que tienen cosas que esconder.

domingo, diciembre 02, 2007

El mundo no está loco... Está imbécil

Uno de mis queridos lectores me decía la otra noche que vaya vago que era yo, que llevaba ya casi diez días sin escribir nada. Mi respuesta (o más bien, mi excusa, para qué nos vamos a engañar) fue que con tantos temas, no sabía por cuál decidirme. Al final te hago caso, camarada, y voy a hablar un poco de todo:
En primer lugar, quería referirme a la promesa electoral de Rajoy. Sí, ya sabéis, ésa de que va a bajar los impuestos. Esta derecha siempre es igual... Siempre beneficiando a los ricos. Porque claro, como bien sabéis, toda bajada de impuestos supone que todos los ciudadanos tengan más dinero para gastar, pero eso no significa que beneficie a todos por igual. Es decir. Con menos impuestos, los servicios públicos tienen menos financiación, así que, a la larga, la bajada de impuestos beneficia a los que hacen uso de esos servicios públicos en menor medida, es decir, los ricos, que mandan a sus hijos a colegios privados y que curan sus enfermedades en clínicas privadas. O sea, que les importa un carajo que los colegios y hospitales públicos tengan menos dinero.
En segundo lugar, me gustaría hablar de ese tal Alcaraz. Ése que cuando ETA mata, en lugar de manifestarse contra el terrorismo, se manifiesta contra el Gobierno. Ése que dice dirigir una Asociación independiente pero que ayuda al PP en su campaña de insultos al PSOE. El mismo que decía que su juicio por injurias pondría muy contentos al Gobierno y a los terroristas. Pero en eso se equivocaba. Su juicio pone contentos a todos los que creemos que los culpables del terrorismo son los terroristas y a todos los que pensamos que lanzar muertos contra los rivales políticos es de mal gusto. Además, me gustaría que Alcaraz algún día, a ser posible sin ponerse demasiado colorado o sin que se notara que se aguanta la risa, explicara por qué no convocó manifestaciones contra el PP si su Gobierno también negoció con ETA y fue el único Gobierno que concedió beneficios penitenciarios reales a etarras condenados (no voy a entrar en polémicas, leedlo aquí). Por cierto, Alcaraz estará hoy contento, porque tiene otro muerto que lanzar contra el Gobierno. Alguien que, por cumplir con su trabajo, fue asesinado por las espalda, porque los disparos de los cobardes se reciben siempre por la espalda.
El tercer tema que quería comentar hoy entronca con algo de lo que ya hablé hace algunas semanas. Quería hablar de esos científicos que fueron denunciados por investigar con células madre. Hay que fastidiarse. Si recordáis, hace un par de semanas hablaba de que todavía hay mucha gente que no acepta lo que dice la ciencia. Pues resulta que ahora ya no sólo no se acepta lo que dice la ciencia, sino que encima se intenta evitar que avance. Todos sabemos que la investigación con células madre puede ser la respuesta a ciertas enfermedades congénitas, así que no veo por qué la investigación debe verse retrasada si va a redundar en el beneficio de toda la sociedad. Pero tampoco es para quejarse: hace unos pocos siglos, esos científicos hubieran acabado en la hoguera.
Y seguro que aún hoy hay quien desearía que acabaran allí.
Nota: Hoy, día 5 de diciembre nos encontramos con dos noticias, una buena y una mala: la buena, que dos de los etarras que atentaron el sábado han sido detenidos en Francia. La mala, que, desgraciadamente, el segundo guardia civil también ha fallecido.

martes, noviembre 20, 2007

Por suerte, los sueños, sueños son

Ahora que ya sé por qué mi natural rival político no ha escrito ningún comentario en este blog en los últimos tiempos (suerte con ese congreso, ya me contarás a la vuelta), ya no tengo motivos para esperar antes de volver a escribir. No obstante, tampoco se me ocurría nada sobre lo que hacerlo. Pero, una vez más, las musas volvieron a iluminarme (porque si no llegan a hacerlo, a mí no se me hubiera ocurrido nada, je, je). Hace un par de noches tuve un sueño un tanto estrafalario, de modo que voy a compartirlo con vosotros, pero eso sí, convenientemente vestido de bonito y convertido en un relatillo más o menos pasable.

Algo me despertó. Miré el reloj y marcaba las tres y cuarto de la madrugada, la hora a la que, según cuentan, suceden los fenómenos paranormales. Pero yo sabía que lo que había pasado, si bien de normal tenía poco, tampoco era paranormal.
- Otra vez - pensé.
Bajé las escalera una vez más, y al llegar al recibidor, apenas tuve tiempo de saltar detrás de un pequeño mueble para evitar una ráfaga de disparos.
Por tercera noche consecutiva, ese chiflado había intentado matarme. Y no sabía qué me resultaba más molesto, si no saber qué tenía contra mí, o el hecho de que siempre lo intentara de noche, para despertarme.
Y para encima, tenía mala puntería. En tres noches no había conseguido hacerme ni un rasguño. Pero anoche había conseguido destrozar un jarrón de porcelana (caolín, para más señas) y hacer varios agujeros en un cuadro de Toulouse-Lautrec que estaba colgado en la pared del zaguán.
- A ver, imbécil - grité -. Ya que me despiertas, ¿sería mucho pedir que por lo menos hicieras bien tu trabajo? Se me está empezando a agotar la paciencia, desgraciado. No me gusta que me despierten para nada.
Por toda respuesta, escuché correr y después el motor de una motocicleta que arrancaba y se iba a gran velocidad.
Menuda estupidez. Supongo que a este descerebrado lo habrán contratado para matar a otro tío y no se da cuenta de que no soy yo. Si por lo menos tuviera buena puntería, acabara de una vez y dejara de dar el coñazo; si es que ya casi prefiero que acierte y me deje en paz. Pero es que nada. No sé; a lo mejor es que no le pagan por matarme, sino sólo por disparar contra mí. Igual cobra por cada bala disparada. Hay cosas tan raras...
Y seguro que mañana volverá a intentarlo. Otra vez a despertarme para nada. ¡Qué tío más pesado! Y lo mismo, cualquier día, de tanto intentarlo, acierta algún tiro, aunque sea por casualidad, y tenemos un disgusto.
Entonces sonó el despertador. No vivo en un dúplex ni tengo jarrones de porcelana ni cuadros de artistas famosos colgados de la pared. Pero, por lo menos, tampoco tengo a un sicario con mala puntería intentando matarme. Algo es algo.

domingo, noviembre 04, 2007

Y sin embargo se mueve

Muy buenas, queridos lectores.
Cuando se hizo pública la sentencia sobre los atentados del 11-M comencé a buscar por internet las distintas visiones que se daban de la noticia en las distintas páginas, además intentando entrar en páginas de diferentes ideologías, para tener una visión más global y no estar mediatizado por las "visiones prisaicas". Entonces recalé en Libertad Digital. En esta página, caracterizada por sus posturas radicalmente conservadoras (si habéis visto el episodio de Los Simpsons en el que el Actor Secundario Bob llegaba a ser alcalde, os diré que el personaje de Birch Barlow podría estar perfectamente inspirado en cualquiera de los que escriben en esta página), encontré cosas bastante llamativas, ya que mantenían cosas sobre la teoría de la conspiración y hablaban de la Educación para la Ciudadanía desde posturas muy radicales y citando casos sobre los que daban tan pocas referencias que creo que eran casos ficticios (sobre esto, algún día hablaré largo y tendido, que ciertas posturas exigen que se les dediquen textos específicos; ya sé que sobre la asignatura ya hablé, pero igual vuelvo a hacerlo).
Pero claro, cuando me meto en territorio hostil, lo hago con todas las consecuencias, así que seguí mirando esa página y encontré el enlace a otra llamada Criteria Club de Lectores, en la que se venden libros que probablemente gusten mucho a los lectores de Libertad Digital, más que nada porque muchos son libros de gente que escribe en esta página. Concretamente dos libros me llamaron poderosamente la atención. Uno se titula Guía políticamente incorrecta de la ciencia, de Tom Bethell, y el otro El evolucionismo en apuros, de Silvano Borruso (pongo los títulos completos y los nombres de los autores por si acaso los enlaces han cambiado y necesitáis más datos para encontrarlos). En el primero se asegura que en los últimos tiempos se ha tomado lo que dice la ciencia como verdad porque sí. En el segundo, como su título indica, que el evolucionismo es más fácil de refutar que de aceptar. Todo esto, unido al hecho de que todavía hay gente que piensa que la Tierra es plana (os dejo el enlace de la web de la Flat Earth Society y del artículo sobre ella en la Wikipedia), y a que el creacionismo se enseña en colegios de ciertos estados de los Estados Unidos (Utah y Texas, entre otros) al mismo nivel que la Teoría de la Evolución, me lleva a pensar que todavía hay personas que no se han enterado de que la ciencia avanza mucho y de que hay que tener un buen par de cojones para sostener ciertas teorías. La verdad es que en estos tiempos (si no me equivoco, creo que estábamos ya en el siglo XXI) me resulta ciertamente difícil aceptar que todavía haya gente que admita determinadas cosas.
Sé que los que dicen esas cosas son pocos, pero no puedo evitar el sentirme un poco asustado. En muchos aspectos, parece que no hemos avanzado nada y que mucha gente prefiere que la verdad no le amargue sus creencias.
Las cosas como son. La mayoría de la gente no admite lo que dice la ciencia porque sí, sino porque la susodicha ciencia nos da las explicaciones más sencillas (según Occam "en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla es siempre la correcta), es decir, las que valen.
Pero claro, todavía hay quien opina que la expliación más sencilla no es la correcta. Que es más fácil creer que las pirámides de Egipto las hicieron extraterrestres (que hay quien lo dice) y no seres humanos. En definitiva, que nada es como nos lo contaron.
Y en momentos así, me acuerdo de Galileo que fue obligado a negar su teoría de que la Tierra gira en torno al Sol para que no lo quemaran. O de Miguel Servet, que por atreverse a pensar por sí mismo acabó condenado dos veces (primero por los católicos, pero se escapó antes de que lo quemaran, y después por los protestantes, que ésos sí lo quemaron). Yo antes pensaba que el sufrimiento de esos científicos no había sido en vano porque a pesar de todo nos habían enseñado la verdad.
Pero ahora me doy cuenta de que muchos están más cómodos viviendo en la mentira.

Bueno, y ahora, cambiando de tema, voy a hablar de otra cosilla que no tiene nada que ver con lo que decía hace un momento y que probablemente a la mayoría de vosotros no os importará nada (con razón, por supuesto). Hace cosa de unos diez días, estuve discutiendo (brevemente, por suerte) con uno de vosotros sobre la dictadura Argentina. El colega decía que en ella "sólo" habían muerto 5.000 personas y yo que muchas más. Encontré un artículo de El País que no va de eso en sentido estricto, pero en el que se menciona que hay reconocidos 18.000 muertos y desaparecidos, aunque otros organismos hablan de hasta 30.000. Supongo, según tú lógica, camarada, que serían 18.000 tíos que fueron a por tabaco y no volvieron.
Nos vemos.

Conspiración en la sombra

Empiezo este texto agradeciendo a mis (escasos) lectores sus amables palabras en los comentarios del texto anterior. Aún así, sé que me lee alguna persona más, pero no escribió (a ver si me voy a tener que mosquear...). Dicho esto, empiezo.
Como bien sabéis, queridos lectores, por fin se conoce la sentencia por los atentados del 11-M. En ella se han dejado claras unas cuantas cosas, y, sobre todo, se ha conseguido por fin quitar la razón a los que hablaban de conspiraciones.
Pero ha sucedido algo realmente curioso: Resulta que ahora, por supuesto, lo de las conspiraciones nunca existió, que quienes decían que las bombas eran de ETA jamás lo dijeron, que los que cuestionaron el trabajo de la policía ahora son miembros del Club de Fans de la Madera y que todos sabían de antemano que los atentados eran cosa de islamistas. Hay que ver qué desagradecidos somos los españoles... Mira que ellos ya sabían que no había sido ETA y vamos nosotros y los sacamos del Gobierno porque pensábamos que nos querían engañar. Si es que...
Bueno, también hay otra cosa que comentar, y es que ésos que nunca apoyaron teorías de la conspiración y que nunca cuestionaron el trabajo de la Policía ahora se enfrentan a una querella interpuesta por el Sindicato Unificado de Policía por difamación y esas cosas. Creo que ahora sería el momento de que muchos de los responsables de esa teoría que nunca existió se plantearan la posibilidad de dejar la vida pública y ser, no sé... porteros de bares de alterne, que es para lo que muchos valdrían si tuvieran lo que hay que tener. Pero, como ya dije una vez, la autocrítica es difícil si creemos que todos los demás son los que están equivocados.
Pero claro, todavía alguien dirá que no se sabe qué estalló en los trenes (por cierto, los peritos no lo dijeron a la ligera, un investigador serio, sea del campo que sea, antes de hablar busca pruebas y es entonces cuando habla) o que lo de Leganés todavía no está claro (como si nunca nadie hubiera aplicado aquello de "no me cogeréis vivo"). Pero eso, ya se sabe, no se relaciona con la teoría de la cospiración.
Y tampoco se relacionará con ella eso que dijo Mariano de que hay que seguir buscando a los "autores intelectuales". Eso me lleva a dos reflexiones. La primera, la postura neocolonial desde la que ese tío habla, ya que insinúa que los islamistas no pudieron ser, seguramente porque, según él, no tendrán capacidad para esas cosas (como si para poner bombas hiciera falta un doctorado en Química o como si los etarras tuvieran todos ellos premios Nobel de Física). La segunda es más bien una pregunta: ¿por qué cuando hay un atentado de ETA no se busca a "autores intelectuales" y cuando son otros sí? ¿Tal vez porque sólo aceptarán la verdad cuando sea la que les conviene?
Pensad en ello.
Pero, afortunadamente siempre queda gente coherente. Ahí tenemos a Aznar manteniendo contra viento y marea sus antiguas mentiras (bienvenidos al pasado). Menos mal que siempre nos quedará él...
Nota: Ilustrando este texto, la viñeta de Forges publicada en El País el día 1 de este mes.

jueves, noviembre 01, 2007

... y que cumplas muchos más

Puff... Cómo pasa el tiempo. Hoy hace un año que creé este blog. La verdad es que ha sido un año muy interesante, con unas oposiciones por medio, con políticos que se insultaban, con polémicas de toda índole, con cosas que celebrar, con cosas que olvidar... Vamos, que no nos aburrimos.
Un año. Un año escribiendo sobre lo que me dio la gana en cada momento, siendo la voz que clama en el desierto y usando este blog como tribuna de opinión y como foro de debate.
Un año a lo largo del cual también ha habido cierta evolución en los textos que escribo. Desde los textos cuidados del principio, de los que escribía varios borradores antes de darlos a conocer, al final he pasado a improvisar la mayoría de lo que escribo (¿entendéis por qué a veces lo que escribo parece un tanto caótico y desordenado?). Todo es evolucionar.
No creo que el mundo haya cambiado porque yo haya escrito estas cosas, pero desde luego, yo me lo pasé genial. Y además, estos textos os han ayudado a conocerme un poco mejor.
Ahora os pido una cosa: Sé que hay unos pocos colegas que me leéis, pero normalmente sólo uno escribe (por cierto, gracias Pedro), así que me gustaría que esta vez, y sin que sirva de precedente, todos lo que leáis este texto pongáis algo. Así sabré qué público tengo (y también sabré si vale la pena seguir escribiendo, no vaya a ser que seáis tan pocos que no valga la pena, je, je).
Por cierto, en el comentario del texto anterior dije que no hablaría de la sentencia del 11-M... el día de la sentencia. Así que ya sabéis de qué va a ir el próximo texto.
Nos vemos.

viernes, octubre 26, 2007

Cambiar o no cambiar

Esta semana la política ha vuelto a darnos otro disgusto. Resulta que Marianín volvió a abrir la boca para decir algo. Esta vez nos ha contado que, según su primo, no se puede saber el tiempo que hará mañana y, por tanto, tampoco el que hará dentro de cien años.
Eso es muy interesante por varios motivos. En primer lugar, porque, de ser cierta esa afirmación de Rajoy, el pariente (que, dicho sea de paso, parece ser que es un físico bastante respetado) habría dicho algo que dejaría a la altura del betún a los meteorólogos . Precisamente por eso mismo no acabo de creerme que lo dijera, porque no suele ser muy habitual que alguien raje de su gremio, porque la Meteorología, como sabemos, es una rama de la Física (bueno, en España sí es normal rajar de los compañeros, pero no estamos hablando de eso).
En segundo lugar, porque el cambio climático es algo de lo que ya están bastante de acuerdo los científicos. A estas alturas de la película, hay un cierto acuerdo entre la comunidad científica sobre eso de que se nos está calentando la Tierra, o por lo menos sobre el hecho de que los glaciares se están derritiendo, que digo yo que no será por casualidad.
Hombre, es posible que la postura de Al Gore sea un tanto catastrofista, pero no por eso vamos a negar que el clima está cambiando, que hace más calor, que se nos desertifica media Península Ibérica y que tal como está el patio, la Tierra está sufiendo. Puede que no sea todo tan negro como dice Gore, pero no podemos negar que hay que hacer algo.
Desde mi humilde punto de vista, esta vez Rajoy habló de lo que no sabe por no callar, intentando disfrazar su ignorancia con una careta de campechanía que, por cierto, no le queda nada bien. Pero todos los que sabemos que va a perder las próximas elecciones nos alegramos: Así no hace más que ayudar a que otros ganen las elecciones.
Y ahora, antes de que Pedro me recuerde las pulsaciones climáticas que ha habido en los últimos siglos, me permito recordarle las clases de aquel profesor de Prehistoria de primero que nos decía que la próxima pulsación tendría que ser fría, porque tras la Pequeña Edad del Hielo esa del XVII y la posterior subida de temperaturas, ahora debería volver a enfriarse la cosa. Es lo que tiene.
Y encima, Aznar sacó otro libro. Desde aquí lanzo un llamamiento a la Editorial Planeta: Si necesitan alguien que les escriba tonterías, me ofrezco voluntario, y les digo que yo les saldría más barato que Aznar. Además, si me contratan a mí sólo pagarían mi sueldo, no necesitarían contratar a "negros" para que escribieran.

jueves, octubre 18, 2007

Actualidad, memorias, historias...

Ya estoy aquí de nuevo, intentando sacarle punta a la actualidad. Hoy me gustaría referirme a algunos de los temas que están marcando la actualidad política estos día, que no dejan de ser marear la perdiz con más de lo mismo, pero diciéndolo con más mala leche y con peor educación.
En primer lugar, voy a hablar las movidas que se han montado con el referéndum de Ibarretxe. Resulta que el Gobierno ya le ha dicho que no, que ni se le ocurra plantear eso de independizarse, que va contra la Constitución, contra el sentido común, que es ilegal, inmoral y engorda. Pues ahora va Rajoy y dice que hay que dejárselo más claro. Que le han dicho que no, pero poco, y que si le dijeron que no, es porque él, Rajoy, lo había propuesto, no porque el Gobierno quiera impedir el susodicho referéndum y la independencia. Claro, es lógico. Ahora los Gobiernos hacen lo que dice la oposición. Es lo que pasa siempre. Seguro que cualquier día, el Gobierno lo dice cantando, a ver si a Rajoy le gusta más.
Otro tema de estos días es el de la Ley para la Memoria Histórica, que está en pleno debate. Desde mi humilde punto de vista (de alguien que no tiene ni puta idea, claro, total, sólo soy historiador, qué sé yo de estas cosas), esta ley es necesaria. Porque hay gente que sufrió una dictadura y necesita ver cómo esa dictadura es condenada, porque hay gente que quiere saber dónde están los cuerpos de sus muertos (de uno y otro bando, por supuesto, que atrocidades las hubo por los dos lados) y porque hay personas que se sienten insultadas cuando pasan por calles con nombres como División Azul (que está en Oviedo). Pero ahora llega Mayor Oreja y pregunta que por qué tienen que condenar el Franquismo si tanta gente lo apoyaba. Lógico. El nazismo también tuvo mucho apoyo popular, y ya se sabe lo bueno que fue. Acebes, probablemente el político que más odioso me resulta, metió baza después y añadió que hablar de estas cosas debería quedar en manos de historiadores (mira, como yo). Lo que no sabe es que la labor de los historiadores serios (en esta denominación no incluyo ni a César Vidal ni a Pío Moa, por supuesto) es precisamente divulgar la Historia para ponerla al alcance del público, de los ciudadanos. Y ahora que ya hay un acuerdo más o menos total entre los profesionales de estas cosas en decir que el Franquismo fue lo que fue (una dictadura impuesta contra un Gobierno democrática y legítimamente elegido), es un buen momento para que se pueda condenar esa dictadura de manera "oficial".
Pero todo se lía. Ya mencioné hace algunas semanas que van a beatificar a algunos curas represaliados durante la Guerra Civil. Y no es que me parezca mal, es que no me parece el momento apropiado. Si queremos que haya concordia y buen rollito lo lógico sería no andar con esas cosas. Y si queremos beatificar, pues beatificamos a no sólo los asesinados por los incontrolados del Bando Republicano (he ahí la diferencia, por mucho que diga César Vidal), sino también a los otros, a los asesinados por los Franquistas, que también hubo unos cuantos, durante la Guerra y después (¿a que no sabíais que Asturias fue, después de Madrid, la provincia con más represaliados en la Posguerra?).
Pero bueno, a ver cómo acaba esto.
Si es que la política nos da cada disgusto...

viernes, octubre 12, 2007

A ver la ballena

No sé si sabéis que tal día como ayer del año 1.895 encalló una ballena en la costa gijonesa. El cetáceo en cuestión se convirtió en el pasatiempo de los habitantes de la ciudad, y de ahí vino la frase que todos conocemos de "Vete a ver la ballena", queriendo decir a nuestro interlocutor que se vaya a freir espárragos y deje de darnos la brasa. Después de esta introducción que poco tiene que ver con el tema real de este texto, comienzo.
El verdadero tema que me gustaría tratar, como no podía ser menos, es el del vídeo de Mariano, que me ha llevado a pensar que el líder del PP tiene ciertos problemas además de sus evidentes problemas de dicción. Sí, porque cuando alguien que no es Jefe del Gobierno ni Jefe del Estado hace un vídeo así, una de dos: O no tiene sentido del ridículo o se cree algo que no es.
Yo más bien creo que en este es por lo segundo, y por un par de motivos. En primer lugar, porque intenta darle un tono de mensaje institucional, como si él fuera el Presidente del Gobierno, olvidando algo obvio: QUE ÉL NO ES EL PRESIDENTE DEL GOBIERNO, sino que en su momento perdió las elecciones y por eso sólo es el líder de la oposición (y por poco tiempo, que en marzo se le acaba el chollo de la política y tendrá que volver a trabajar honradamente).
En segundo lugar, creo que no tiene sentido del ridículo por las cosas que dice y la manera, tan cercana a los mensajes navideños del rey, de intentar convencernos. Como diría aquél a quien nadie dice cuánto se debe beber para conducir, ¿quién le dijo a Rajoy que puede decirnos cómo celebrar la fiesta nacional? ¿Por qué habríamos de hacerle caso cuando dice que pongamos banderitas por todas partes? ¿Realmente cree que vamos a hacerle caso él, que lo único que hizo fue perder unas elecciones?



Claro, que últimamente Rajoy está demostrando una falta total de ideas que le hace agarrarse a un clavo ardiendo: ¿Que un par de exaltados queman fotos del rey? Pues es porque el Gobierno está dando alas a los nacionalistas, olvidando que hay cuatro que queman fotos y cuarenta millones que no lo hacen (aunque algunos lo pensamos en algún momento, dicho sea de paso). ¿Que ETA pone una bomba? La culpa, por supuesto, del Gobierno que lo permita (olvidando que últimamente han ido a parar a la cárcel algunos etarras y colaboradores). Pero bueno... ésa es su idea de la coherencia.
Por todo ello le digo a Rajoy que, por mí, se puede ir a ver la ballena (¿a que ahora ya entendéis a qué venía lo de antes, je, je?).
Ah... y encima hoy en el desfile de las Fuerzas Armadas, la Legión en vez de cabra llevaba un carnero. Si es que las cosas ya no son lo que eran.
Nota: El dibujo es uno de Romeu que se publicó hoy en El País.
Nota 2: Sobre el tema del texto de la semana pasada, os comento que hoy le fue concedio a Al Gore el Nobel de la Paz.

domingo, octubre 07, 2007

Verdades incómodas

Resulta que estos días hay muchas noticias. Que si hace hoy un año que mataron a la periodista rusa Anna Politkóvskaya, que si estos días se cumplen cuarenta años de la muerte del Che, que si el Sporting está que se sale, que si hoy Hamilton tuvo que retirarse en la carrera de Fórmula 1, que si hasta la derechona más recalcitrante (con Jiménez Losantos a la cabeza) está pidiendo la abdicación del rey, que si se detiene a etarras y colaboradores suyos, que si Rajoy sigue diciendo que el Gobierno pacta con ETA (coherencia ante todo)... Como las noticias son tantas, no sé por cuál decidirme para escribir, así que voy a comentaros algo sobre cierto documental que vi no hace mucho.
Se trata de Una verdad incómoda, sí, el de Al Gore. El DVD venía con el último número de National Geographic y claro, valía la pena pillarlo para echarle un ojo. La verdad es que no está nada mal. Ya uno de vosotros había escrito cosas sobre ese documental en su blog, y me había resultado interesante.
El colega nos cuenta algunas cosillas que deberíamos tener en cuenta sobre el cambio climático y esas cosillas que, como todos sabemos, no son más que invenciones de melenudos catastrofistas, a pesar de que, mientras el calentamiento global y el cambio climático no suceden, los glaciares se están derritiendo.
Hombre, también hay que reconocer que el documental sirvió para que Al Gore volviera a la actualidad después de perder unas elecciones de manera fraudulenta. Pero eso es otra historia.
La película en cuestión es muy recomendable. Es interesante echarle una ojeada a las teorías que se mencionan en ella, porque pueden servirnos para entender algunas cosillas, además de darnos algunas ideas sobre cómo paliar, en la medida de nuestras posibilidades, los efectos del paso de la especie humana por la tierra. Por todo ello os recomiendo que la veáis.
Que no todo va a ser el cine de Bruce Willis.

viernes, septiembre 28, 2007

Adiós

Hace unos días encontré en una carpeta de mi ordenador este breve texto que había escrito allá por febrero de 2005. Ya ni me acordaba de él. Volví a leerlo y la verdad es que no me parece que esté mal, así que decidí compartirlo con vosotros:

“Adiós” dijo él, y esa palabra sonó tan rotunda como una puerta que se cierra.

Se puso de pie y comenzó a caminar hacia la puerta de la cafetería, con la cabeza alta y la arrogancia de un guerrero medieval que vuelve victorioso de una batalla. Ella lo miraba alejarse con los ojos inundados de lágrimas y con un nudo atenazando su garganta e impidiéndole hacer lo que más deseaba en ese momento: gritar. Los pasos firmes de él resonaban en su cabeza como si en lugar de ser los pasos de un hombre fueran los de una enorme bestia.

Él sentía el peso de los ojos de ella clavados en su espalda. En su interior sentía la necesidad de volverse y decir que nada de aquello era en serio, que no quería irse para siempre, pero su orgullo se lo impedía. Tuvo que apretar con fuerza los dientes para no sucumbir a la tentación. Cuando cruzó el umbral de la puerta, sintió que un enorme vacío se abría dentro de su corazón.

Ambos sabían que aquello era para siempre.

lunes, septiembre 24, 2007

Así va el mundo...

Alegre porque por fin alguien escribió un comentario en mi texto anterior, vuelvo a la acción. Sí, ya sé que había prometido que no volvería a hablar de política hasta el día 1, pero es que hay temas que si no los comento ahora, se me pasan.
En primer lugar, hablemos de pisos. Todos sabemos cómo está el patio y ahora que las elecciones generales ya tienen fecha y sabemos quiénes van a ser los candidatos (como si antes no lo supiéramos), podemos esperar que nos cuenten cómo piensan arreglar las cosas. Y entonces empieza a pasar algo que me encanta: Que todos nos cuentan ideas irreales para hacer como que van a cambiar las cosas sin, en realidad, cambiar nada. Pero, mira tú por dónde, a Rajoy se le ha ido la pinza. Sí, porque en vez de querer vendernos la moto, nos cuenta la verdad: Nos dice que va a liberalizar los precios del suelo. Cojonudo. Así podremos ver cómo se construye en cualquier sitio y a cualquier precio. No sé... igual me hacía más ilusión que me mintiera y me dijera que no se va a volver a construir en las costas.
En segundo lugar, hablemos de memoria histórica. Resulta que este próximo mes de octubre, en Roma unos cuantos curas van a ver si beatifican a los "mártires de España", es decir, a los muertos del mal llamado "bando nacional" (con tiempo, con ganas y, sobre todo, sin nada mejor que hacer, os explicaré por qué considero que no se debería usar el concepto de "bando nacional" para hablar de los franquistas). Cuando veo estas cosas me asalta una pregunta de índole histórica: Si todos cometieron atrocidades... ¿por qué siempre se beatifica a los mismos?
No sé, son cuestiones que me inquietan y que no quería dejar pasar.
Si con cosas como éstas, no es de extrañar que el mundo vaya como va (de culo).

martes, septiembre 11, 2007

Una fecha señalada

En El País de hoy, 11 de septiembre, se publicaba esta viñeta de Elrich. Hace referencia a algo obvio: hace seis años las Torres Gemelas que daban buena parte de su carisma a la sky line de Nueva York fueron derribadas en el mayor ataque terrorista de la Historia. Recuerdo muy bien qué hacía yo aquel día. Mientras muchos de mis amigos estaban de exámenes, yo había quedado con otro (uno de vosotros, queridos lectores) para acercarme a la playa, que todavía hacía buen tiempo. Además, aquel dia llegaba la Vuelta a España a Gijón, complicándome bastante lo de coger un autobús para llegar a donde habíamos quedado. Pero la noticia del día no tenía nada que ver con el deporte, sino que se refería a la sinrazón y la barbarie. Las noticias que llegaban desde La Gran Manzana eran estremecedoras y, mientras yo las escuchaba en la tele, con el bañador ya puesto, no podía hacer nada más que mirar a la pantalla boquiabierto (literalmente) y sin entender nada. La frase del colega cuando nos reunimos en una de las escaleras de la playa fue bastante ilustrativa: "Puede estallar la tercera".
Después, todos sabemos lo que pasó: La invasión de Afganistán, la de Irak, el recorte de derechos en Estados Unidos en busca de, supuestamente, una mayor seguridad, aeropuertos en los que cada vez hay más medidas de seguridad... Y el mundo no es, ni de lejos, más seguro que hace seis años, como se vio el 11 de marzo de 2004 en Madrid o el 7 de Julio de 2005 en Londres, o más recientemente en Argelia. Se demuestra así que la venganza no suele servir de nada.
Pero me gustaría recordar también que tal día como hoy, pero de 1973, ocurrió otro hecho histórico bastante desagradable. El golpe de Estado de Pinochet en Chile, financiado, por cierto, por Estados Unidos. En esa financiación tuvo mucho peso el papel de Henry Kissinger (que, por cierto, sale en un episodio de Los Simpsons), que, para mayor burla de los chilenos (entre otros), fue galardonado con el Nobel de la Paz (manda huevos, como dijo aquél).
Menos mal que estos días anda por España el Dalai Lama y nos deleita con reflexiones como las que hizo esta mañana en la Cadena Ser, intentando que comprendamos que el camino es el diálogo.
Nota: Ahora me gustaría citar el comentario que una de vosotros hizo al texto que colgué el 11 de marzo ("¿Dónde estabais en los malos tiempos?"), porque me parece que dice algo muy interesante que se puede aplicar también al día de hoy: "Ahora que recuerdo aquello, sólo espero que en el futuro las fechas que se graben a fuego conmemoren hazañas nobles que nos permitan esbozar una sonrisa". Pues eso.

viernes, agosto 31, 2007

Cuerdas de acero

Estuve a punto de titular este texto como una canción de los Beatles, pero afortunadamente me arrepentí a tiempo. Qué le voy a hacer, yo soy de los Rolling.
Sigo con los temas ligeros, en vacaciones no me gusta hablar de política, de modo que tampoco recojo el guante lanzado desde el blog de uno de vosotros. El uno de octubre ya seguiremos discutiendo (por cierto, Pedro, vete pensando en un nuevo título para tu blog, porque el título actual perderá sentido el año que viene, cuando Rajoy vuelva a perder las elecciones).
Volviendo al tema que me ocupa, hoy me gustaría presentaros a mis dos amores principales: Mis guitarras. Los que ya habéis leído mi relato titulado "Sombra y luz", ya sabéis qué modelos son. Ahora las conoceréis en imágenes.



Ésta es la primera, mi guitarra española, que me acompaña desde hace diez años. Una Azahar modelo 110, realizada a mano y con maderas incrustadas. Es una gozada. Con ella aprendí lo que sé y es mi primer amor. Raimundo Amador dice que cuando vio su guitarra (la famosa "Gerundina") en la tienda se enamoró de ella. A mí me pasó algo parecido. Tenía un presupuesto de 25.000 de las antiguas pesetas y lo fundí entero en ella. Pero fue un flechazo. A medida que me iban enseñando guitarras yo sólo esperaba que me sacaran ésa que estaba colgada y que, de alguna manera, me llamaba desde su soporte. Cuando dije, "sácame una un poco mejor" y la descolgó, estaba seguro de que no iba a ver más instrumentos. Y tenía razón, sobre todo porque mi disponibilidad económica no me permitiría nada mejor.
Con esta guitarra doy rienda suelta al poco virtuosismo del que soy capaz. Con ella toco igual canciones modernas como temas clásicos, y así, temas de Beethoven se dan la mano con canciones de Fito, Saratoga o Bon Jovi (sí, Bon Jovi, ¿qué pasa?). Tocando con los dedos o con púa, el sonido es maravilloso, cristalino. Jamás me separaré de ella. Por cierto, ésta guitarra es la que usé en el "concierto privado" que hace años hice para alguien que me lee.



Ésta es la segunda. Una Fender Stratocaster Standard, modelo mexicano (la diferencia entre el modelo fabricado en México en serie y el fabricado en Estados Unidos a mano es sobre todo el precio: la guitarra americana cuesta el triple aunque suena casi igual que la otra). Según la tabla de colores de Fender, este instrumento está pintado en un color llamado "Midnight Wine Burst", aunque yo siempre resumo diciendo que es granate. Desde que decidí que me iba a comprar una guitarra eléctrica tenía claro que sería una Stratocaster. No en vano, es la que usaba Jimi Hendrix y una de las que usa Eric Clapton.
Es otra joya. Con sus tres pastillas de bobinado simple y enchufada a un amplificador Marshall G15RCD de sólo 15 watios, me sirve para volver tarumbas a los vecinos. La tengo exactamente desde el día 27 de Diciembre de 2000. Con ella alterno momentos de rabia con otros más tranquilos. Secuencias de acordes muy duras se mezclan con punteos más tranquilos, y la distorsión y la velocidad compiten con sonidos limpios y delicados. No lo puedo evitar, a veces necesito desfogarme y subo la distorsión hasta límites infernales, mientras los músculos de mis brazos se tensan y aprieto los dientes. Otras veces, sólo quiero tocar a velocidad de vértigo sin importar la claridad del sonido. Hay veces, en fin, en las que adapto lo que toco en la española a ésta y busco hacer una suerte de fusión musical. Saratoga, Led Zeppelin, WarCry, Roling Stones, Guns n' Roses, Iron Maiden,... Todos tienen cabida en las notas que salen de las cuerdas de esta guitarra.

Bueno, camaradas. Ya conocéis a mis dos amores.
Hasta la próxima.

sábado, agosto 11, 2007

La canción del verano

Todos los veranos tenemos una serie de temas clásicos: El posado de Ana Obregón en la playa, los atascos de tráfico, lo caras que son las paellas en los chiringuitos... Y la canción del verano. Es decir, aquella musiquita (o algo parecido) que va a sonar de manera insistente en las noches veraniegas y que escucharemos una y mil veces hasta llegar a aprendérnosla, y que además va ser recurrente en las cadenas de radio y/o televisión musicales a lo largo del verano (y de los meses previos, dicho sea de paso). Pero debo decir que a la hora de hablar de la canción del verano siempre me asalta la misma duda: ¿por qué hay canción del verano pero no canción del invierno? Bueno, tengo la esperanza de que esa cuestión reciba cumplida respuesta cuando la investigación avance.
En esto de la canción del verano hay una serie de especialistas que cada año nos amenizan (dicho sea con toda la ironía del mundo) los calurosos días con sus más novedosas creaciones, como por ejemplo Giorgi Dann (o como carajo se escriba), al que todos recordamos por temas tan imprescindibles como "La Barbacoa" y similares. Otra conocida canción del verano fue la celebérrima "Aserejé", que además sirvió para que mi antiguo tutor del doctorado hiciera un chiste en clase del que sólo se rió él.
Pero también hay canciones del verano inesperadas, como fue hace bastantes años (en mi tierna e inocente infancia) una canción que todos cantamos alguna vez titulada "Aquí no hay playa" de un grupo de Ska llamado The Refrescos a los que se les conocieron pocas canciones más (yo sólo escuché una más aparte de la de "Aquí no hay playa").
Este año no hay duda. La canción del verano se la debemos a una italiana que se hace llamar Tata Golosa y que nos deleita con un tema titulado "Micromanía", pero que todos conocemos como "Los micrófonos". En este caso estamos ante un hito en la canción del verano, asistimos, por así decir, a una suerte de momento histórico. Sí, porque antes las canciones del verano podían ser simples o incluso un poco tontas, pero es que "Micromanía" es directamente una canción para tontos. No hace falta saberse la letra para cantarla. Basta con repetir cada tres sílabas "los microfónos" y ya está. Toda una novedad.
Encima su videoclip es muy llamativo. Salen unas tías bailando con cara de colgadas que me dan cierta pena. Hay cosas más degradantes que salir en ese video bailando como zombis, pero no son legales.
Si es que la música ya no es lo que era.

lunes, agosto 06, 2007

Tópicos

De nuevo estoy aquí, para sacarle punta a la actualidad. Sigo prefiriendo los temas "ligeros", por eso de las vacaciones, de modo que esta vez voy a meterme con un anuncio de televisión.
Supongo que todos habréis visto ya el anuncio del sorteo especial de verano de la ONCE. Ése del sorteo más heavy de la Historia. Pero claro, como parece ser que la peña no tiene mucha idea de lo que es el Heavy Metal y cómo son las personas que lo escuchan, tiran del tópico, el mismo que se usó en películas tan deleznables como Isi / Disi.
De este modo, presentan a los heavys como unos gañanes sucios y horteras con una actitud que, de tan chulesca, resulta ridícula. Encima, aderezan el anuncio con la canción "The Final Countdown" de Europe, canción, por cierto, elegida por el canal televisivo VH1 como la canción más "antimetalera" de la Historia. Luego nos quejaremos si, a la entrada de algún concierto, llega un periodista, muy enterado él, y nos pregunta cosas del tipo "¿tú cómo te defines, como heavy, rocker o como qué?" (pregunta hecha por un fulano de La Voz de Asturias anteayer a la entrada del gloriosos concierto de Motörhead aquí en Gijón), que dan ganas de responderle "Yo soy un tío normal, las etiquetas son para que los ignorantes como tú podáis insultar con más facilidad".
Pero claro. Los tópicos ayudan precisamente a eso. A que sea más fácil hablar de lo que no se tiene ni puñetera idea teorizando como si fuéramos expertos. Así, todos los arqueólogos son como Indiana Jones, y de este modo, los turistas se sienten decepcionados cuando visitan un yacimiento en excavación y no ven látigos por allí (os lo dice uno que excavó en algunos yacimientos, y en uno de ellos incluso como arqueólogo profesional).
Otros tópicos son todavía peores. Cuando el tópico dice que los asturianos somos catetos, los catalanes tacaños, los madrileños chulos o los andaluces vagos, ya tenemos la crítica en bandeja. O si dejamos que la imagen del musulmán sea la del fanático que pone bombas y la del homosexual la que aparece en muchas series de la tele, la crítica da paso al odio. Y eso ya es peligroso.
Total, camaradas, que cuando hablamos de algo deberíamos tener una idea mínimamente clara de lo que estamos diciendo y no dejarnos llevar por el tópico. Para no quedar como unos ignorantes descerebrados.

sábado, julio 28, 2007

Pablo Simpson

Aquí estoy de nuevo. Como estamos de vacaciones, voy a hacer un tema ligerito. Como ya sabréis, esta semana se estrenó la película de Los Simpsons, y también sabéis que la serie me gusta mucho. Y me gusta porque es una serie que refleja los tópicos de los Estados Unidos, tanto los que se tienen allí sobre el resto del mundo, como los habituales sobre ellos mismos. Por eso creo que es una serie que, vista con cierto sentido crítico, puede tener mucha miga.
Por eso, el otro día decidí dar un paso más en mi "frikismo simpsoniano". En la web de la película (www.simpsonsmovie.com) se incluye la opción de crear un personaje propio, así que, ni corto ni perezoso, me creé mi propio personaje de la serie. Aquí os lo presento:

El personaje todavía no tiene nombre, así que os propongo una cosa: Si alguno de vosotros tiene alguna sugerencia para el nombre, que me la incluya en los comentarios. Si no, no me quedará más remedio que bautizarlo yo mismo.

Nota: Pues nada, amigos, que a falta de ideas, he registrado el personaje en la web de la peli como Rick Stantonn. Sin embargo, la idea de que fuera un hermano pequeño de Snake me sigue pareciendo interesante.

domingo, julio 22, 2007

Alto Voltaje

"Buenas tardes, Gijón. Buenas tardes, mundo. Bienvenidos un sábado más. Esto es... Alto Voltaje".
Así empezaba hace años el programa de radio que tenía con uno de vosotros. Dos horas de radio a la semana dedicadas a la música más dura, una buena forma de soltar adrenalina cada sábado. Hoy quiero, recordando aquellos tiempos, escribir sobre los discos nuevos (y no tan nuevos) que escuché en las horas de autobús que pasé yendo y viniendo de Vigo. Es posible que a muchos de vosotros no os interese nada, pero me da lo mismo. Así que ahí van:

Fito & Fitipaldis: Por la boca vive el pez. Probablemente no sepáis que, según una leyenda no confirmada, la palabra "kalimotxo" se tomó de una canción del grupo en el que estaba Fito hace años, Platero y Tú. En su canción "Tras la barra" aparece un personaje llamado Gorka Limotxo que habría sido el inspirador de esa palabra. Por cierto, si tenéis oportunidad, no dejéis de escuchar el disco A Pelo, de Platero, probablemente uno de los mejores discos en directo que se han grabado en el rock español. Volviendo a Fito, siempre me pareció un músico muy carismático, un buen compositor y un excelente gutarrista. Por eso me parece que desperdicia su talento con canciones muy simplonas. No me entendáis mal. El disco está bien, pero no tiene la intensidad de otros que ha grabado. No tiene la rabia de los discos de Platero, pero tampoco es tan intenso como sus primeros discos en solitario (sobre todo el nunca bien valorado A Puerta Cerrada, que, aunque os cueste creerlo, era un disco estupendo aunque en él no sonaba ni una sola guitarra eléctrica). La mayoría de las canciones de Por la boca... son muy parecidas entre sí, y consigue que a veces sea aburrido escucharlo. En el disco se incluye una versión de "Deltoya" de Extremoduro, que está a ritmo de rockabilly y suena un poco rara, sobre todo para los que conocíamos la versión original. Fito recupera además un poema al que habían puesto música hace años él y Robe de Extremoduro titulado "Abrazado a la tristeza" que, con arreglos nuevos, suena bastante bien. El resto de las canciones parecen una sola que se repite de manera continua. Pero hay una que me gustó especialmente: "Medalla de cartón". Escuchadla.

Rosendo. El endémico embustero y el incauto pertinaz: Rosendo vuelve a demostrar una vez más que es el mejor y sigue convenciéndome de que acerté cuando una vez en el programa lo llamé "El Patriarca del Rock español". El disco está muy bien, es lo que esperamos cuando escuchamos a Rosendo. La única pega son los títulos. Mira que titular una canción "La gran cagalera"...

Velvet Revolver. Libertad: Este grupo está formado por el antiguo cantante de los Stone Temple Pilots y por tres antiguos miembros de Guns n' Roses: el batería Matt Sorum, el bajista Duff McKagan y el guitarrista Slash, que por cierto, es el bufao del sombrero de copa que sale en uno de los últimos videoclips de Paulina Rubio. Los que me conocéis bien sabéis que, pese a mi amor y fanatismo por la música de Jimi Hendrix, mi primera influencia guitarrística fue Slash, por eso cualquier disco en el que él toque me va a parecer interesante. De hecho, ahora que los Guns n' Roses se han vuelto modernos y ya no son los macarras de antaño, es bueno saber que sus antiguos miembros siguen haciendo en Velvet Revolver la misma música que encumbró a los Guns a finales de los ochenta y principios de los noventa. Un disco muy recomendable.

Transfer. Que sigues así: Transfer no son demasiado conocidos, pese a que llevan muchos años tocando y dando caña por todo el país. Es una pena, porque son muy buenos, y su música, rock urbano sin más adornos, resulta muy interesante. En este disco vuelven a hacer buenas canciones con letras comprometidas. Otro disco estupendo.

Ozzy Osbourne. Black Rain. El Príncipe de las Tinieblas ha vuelto, y esta vez acompañado por el guitarrista Zakk Wylde, de la Black Label Society, todo un valor musical seguro. El disco está bien, pero a veces me da la sensación de que Ozzy se repite un poco.

Megadeth. United Abominations: Un gran disco. Dave Mustaine, el que fuera el primer guitarrista de Metallica, vuelve a hacer otro disco estupendo. La temática es la misma de los últimos discos: canciones sobre la guerra, el choque de civilizaciones y esas cosas tan de moda en los Estados Unidos. A destacar el hecho de que regraba una de sus mejores canciones (y una de mis favoritas), "A tout le monde", contando con la colaboración de Cristina Scabbia, de Lacuna Coil, que, para quienes no la conozcáis, os diré que es guapa y tiene una voz preciosa.

Manowar. Gods of war: ¡¡Qué muermazo!! Manowar son grandes músicos, pero tienen un problema: sus discos son todos iguales. Un disco de Manowar se compone de diez canciones, iguales entre sí, iguales a las diez del disco anterior y, presumiblemente, iguales a las diez del próximo disco, y en las que se desarrollan hasta la saciedad los temas de "somos los más heavys, los más machos, los más duros, y somos los guerreros que vamos a luchar con nuestras espadas y montados en nuestras Harleys contra la confabulación del falso Metal". Si las canciones están bien construidas, la cosa puede tener gracia. Pero en este caso no es así. Es uno de los discos más aburridos que he escuchado en los últimos años.

Helloween. The Legacy Tour. Live in Sao Paulo: Cuando el año pasado me enteré de que Helloween habían mancillado su propio legado añadiendo a sus gloriosos discos Keeper of the seven keys partes I y II (de mediados de los ochenta) un nuevo disco titulado Keeper of the seven keys. The Legacy, pensé "vaya manera de vivir del cuento veinte años después". Este disco en directo se grabó en la gira de presentación de esa tercera parte de la trilogía. La verdad es que nunca me gustaron los discos en directo de Helloween, sobre todo los recientes, porque Andi Deris, que es un gran cantante, no consigue a pesar de todo hacer bien las canciones de la época de Michael Kiske. En este disco en directo sí lo consigue, y borda canciones de todas las épocas de Helloween. "Eagle fly free", "Power" o "Mr. Torture" son tres ejemplos de lo bien que puede hacerlo con canciones de tres momentos muy distintos en la historia del grupo. Lo que no entiendo y necesitaría que alguien me explicara es cómo es posible que después de que Kai Hansen dejara el grupo hace más de quince años, y después de que Michael Weikath lo criticara con una saña salvje, sigan tocando en directo canciones escritas por él como la genial "Future world", y encima tengan el cuajo de usarla para presentar al grupo. Eso es echarle morro a la vida.

W. A. S. P. Dominator: El hecho de que éstos degenerados capitaneados por Blackie Lawless (no en vano, W. A. S. P. son las siglas de "We Are Sexual Perverts") sean los últimos no es casual. Estos fulanos nunca me parecieron demasiado buenos, pero debo reconocer que este disco me sorprendió gratamente. Está muy bien, es un disco durísimo y con canciones muy bien hechas. No deja uno de sorprenderse.

Pues éstos discos (todos de este año y del pasado) y otros más antiguos eran lo que yo iba oyendo en el autocar y los que me sacaron del tedio y del aburrimiento. Bueno, menos el de Manowar.
Ahora toca despedrise, y voy a hacerlo como cuando hacía el programa:

"Larga vida al Rock n' Roll".

viernes, julio 20, 2007

El proceso

Queridos lectores, ya estoy aquí de nuevo. Después de unas oposiciones un tanto desquiciantes, voy a soltar adrenalina con un par de textos en los que os voy a contar mis aventuras por el mundo. El primero, éste, como podéis observar, toma su título de una novela de Kafka.
Y la elección no es casual. Cuando uno se mete a preparar unas oposiciones, corre varios riesgos, incluyendo el de sufrir una Metamorfosis (je, je).
Hablando en serio, el proceso empieza cuando, después de casi un año metido en casa, saliendo lo justo y quemándose las pestañas, uno ve en la página del Gobierno de la Comunidad Autónoma correspondiente (en mi caso, en la página de la Xunta de Galicia) que por fin se convocan plazas.
Entonces se inicia otra parte del proceso. La de cambiar la legislación a la que se acoge mi programación didáctica para que sea la legislación vigente en Galicia. Y entonces hay que buscar las leyes por la red y leerlas para citarlas correctamente. Y están en gallego, por supuesto.
Tiempo después, los colegas de la Xunta deciden colgar en su página dónde van a ser los exámenes de cada especialidad. Y entonces es el momento en el que los de la especialidad de Geografía e Historia descubrimos que nos tenemos que presentar en Vigo (frase de una compañera que se presentó allí: "Si se descuidan, nos presentamos en Portugal"). Ése es el momento en el que hay que buscar alojamiento y forma de llegar. Y es también el momento en el que uno descubre que en Vigo hay muchos sitios donde alojarse, pero pocas formas de llegar allí. De hecho la única opción es tirarse ocho horas (¡¡¡ocho horas desde Gijón hasta Vigo!!!) en autobús o un número aún mayor en tren, y en este último caso encima haciendo transbordo en León. Total, que se llegaría antes yendo en diligencia (¿alguno de vosotros tiene el teléfono de John Ford?)
Después de este traumático descubrimiento, uno no sabe si cortarse las venas o dejárselas largas, pero bueno. Entonces, los de la Xunta dan otra vuelta de tuerca. Llega el momento de hacer públicas las fechas de cada prueba. Es el momento de enterarnos de dos cosas: En primer lugar, que se han inventado el concepto de la presentación de las oposiciones, que se hace un viernes por la tarde y que sirve para explicarnos qué tenemos que hacer a lo largo de este proceso de oposición. En segundo lugar, que muchas especialidades tienen el primer examen el sábado a las diez de la mañana, pero otras lo tienen el lunes a las cinco de la tarde. Los de Geografía e Historia, por supuesto, lo teníamos el lunes.
Después de maldecir en todas las lenguas que conocemos, empezamos a preparar el viaje.
Llega el día de ir hacia allá. Tengo suerte. Mis padres se enrollan y dicen que me llevan hasta Vigo para la presentación, aunque luego tengo que seguir allí y buscarme la vida yo solo. No es mala cosa. Lo malo es que el viaje, aunque sea en coche, es muy largo y llegué a Vigo cansadísimo.
Esa misma tarde tengo la presentación y por primera (y única) vez desde que llegué a Galicia, me hablan en gallego. Entonces nos explican la última puñetería que nos tienen preparada: La prueba oral siempre tuvo dos partes, pero siempre se hicieron las dos el mismo día. Pero este año es diferente. Las dos partes se harán en días distintos, lo que alargará el proceso hasta más allá del veinte de julio (o sea, que las oposiciones van a durar más de un mes). Se escuchan palabras de indignación.
Después de un fin de semana en Vigo repasando y saliendo a cenar con otros opositores en la misma situación, llega el día de la primera prueba. Allí estamos casi cien personas con todos nuestros nervios y con varios litros de tila en el cuerpo. Después de casi una hora sentados y cuando ya no nos quedaban uñas que comernos, empiezan a leer las preguntas (cinco para hacer una):
- Metodología del trabajo geográfico. Técnicas de trabajo geográfico (por suerte quedan otras cuatro preguntas).
- Climas y zonas bioclimáticas (lo bueno es que ya no puede empeorar).
- La Península Ibérica: Relieve, clima y vegetación (¿esto es una broma o qué?).
- Conquista, colonización y administración de la América hispánica entre los siglos XVI y XVIII (mejor vamos recogiendo las cosas para ahorrar tiempo).
- Primera Guerra Mundial, relaciones internacionales en el período de entreguerras y crisis de 1929 (en este momento algunos suspiramos aliviados mientras otros se levantaban y se iban).
Hecho este examen, al día siguiente había que volver, y descubrí lo divertido que es estar ocho horas en un autobús para llegar a casa casi a la una de la madrugada.
Dos semanas más tarde, tras otras ocho horas de viaje, tuve la primera parte de la prueba oral, resumir en veinte minutos la programación didáctica de sesenta páginas que elaboré. Hablé delante de un tribunal de cinco profesores (bueno, cuatro, porque uno pasaba de mí como de la mierda) y resumí un curso entero en 19 minutos. No me dijeron nada (este año no se contemplaba la posibilidad de hacer preguntas ni comentarios a los opositores), me fui del instituto y volví a meterme en el autobús.
La semana siguiente avisaron de que, exactamente diez días después de esta prueba, tenía que estar de nuevo en Vigo. Llamé al hotel para reservar habitación y la chica de recepción ya me reconocía por la voz.
El día 19 (ayer mismo) tenía que exponer uno de los temas de mi programación. El sorteo me deparó tres opciones bastante puñeteras:
- Tema 1: Antiguo Régimen (¡qué coñazo, por favor!).
- Tema 10: El ascenso de los fascismos (el tema más feo del temario).
- Tema 15: El mundo actual (justo el tema que no había mirado).
Me decanto por los fascismos y lo explico en media hora. Podía usar los materiales que quisiera, y yo, como soy de la vieja escuela, usé sólo cuatro: papeles, libros, pizarra y tiza. Pero justo antes que yo se presentaron una chica que iba con su ordenador portátil y otra que llevaba un carrito (literalmente, no exagero) con materiales varios. Todo vale. Lo que es inevitable es sentirse un poco pequeñito al ver los materiales que lleva esta gente. Pero hay que luchar.
Hablo, vuelvo al hotel y, corriendo, a la estación, que a las cuatro y media sale otro autobús. A eso de las diez y media me llama una compañera y me dice que las notas ya están en internet.
A las doce y algo llego a Gijón y queda recapitular. Para los fanáticos de las cifras, os dejo algunas de este proceso:
- Tres exámenes.
- Seis noches de hotel, aunque no pude ver nada de Vigo (y eso que estaba a cinco minutos del Museo de Arte Contemporáneo).
- Más de cinco horas en coche.
- Cerca de cuarenta horas en autobús.
- Más de 15 horas de ensayos para preparar el primer examen oral.
- Más de 13 preparando el segundo.
- Y unos nervios que podéis flipar.
¿Y la nota? Pues la verdad es que aprobé. Y por supuesto, esto no habría sido posible sin vuestro apoyo, y es el momento de daros las gracias por todo, por todas las palabras de ánimo y por esos mensajes y esas llamadas que llegaban a todas horas (incluso de madrugada) y que me hacían llegar todo vuestro cariño. Como dijo uno de vosotros en uno de los e-mails más bonitos que he recibido nunca "hicistéis que mi corazón latiera para que mi cabeza siguiera funcionando". Gracias por todo, amigos.
Nota: El próximo texto será sobre la música que escuché en esas interminables horas de autobús. Y es que a veces añoro los tiempos de aquel programa de radio que hacía con uno de vosotros.

jueves, julio 12, 2007

¿Quién eres tú?

- ¿Quién eres tú? - preguntó al hombre que tenía delante.
Miraba los ojos vacíos que tenía ante sí y no conseguía recordar dónde o cuándo los había visto.
- ¿Dónde te he visto antes? - volvió a preguntar - ¿De qué te conzco?
La expresión interrogante de quien le miraba no hacía más que incomodarle aún más.
Estudió sistemáticamente las facciones del desconocido. Ni la mirada, ni la forma de la cara ni las arrugas que se formaban en la comisura de los labios le eran conocidas.
No entendía nada.
Entonces, sin saber muy bien por qué, se enfureció. Cerró su mano derecha y trató de golpear el rostro que le miraba.
Sin embargo, la cara desapareció de su vista cuando el espejo se rompió en mil pedazos.

sábado, julio 07, 2007

Dad al César lo que es del César...

La verdad es que llevaba tiempo sin escribir. Las oposiciones no me dejan tiempo para nada y menos para escribir tonterías. No pensaba escribir tan pronto, pero hay temas candentes que no se pueden dejar pasar. De hecho, hace varias semanas que me estoy planteando cómo enfocar el tema de hoy.
El tema es el de la polémica formada con la asignatura de Educación para la Ciudadanía, que se va a empezar a impartir el próximo curso. Que si la Iglesia dice que no se debe dar y que estudiarla es ayudar al Maligno, y pide a los padres que ejerzan la objeción de conciencia. Que si Esperanza Aguirre y la línea dura del PP están en contra... Y seguramente ninguno de ellos tenga ni puñetera idea de qué va la movida.
Yo me informé al respecto y creo que algo sé. Lo hice por aquello de que muy probablemente me va a tocar impartirla en el instituto en algún momento de mi vida. De manera muy precavida, estuve buscando en las páginas web de las editoriales los currículos correspondientes a esa asignatura para ver si me enteraba de qué iba. Y, pese a todo lo que dicen, tiene buena pinta.
En primer lugar, se basa en algo tan simple como fomentar en clase la igualdad entre las personas (los obispos dicen que se fomenta la relatividad en la que todo vale, pero bueno, es su punto de vista). Eso no es malo, creo yo; estamos en un país democrático con una Constitución que, creo recordar, dice más o menos eso.
En segundo lugar, en esa asignatura se habla de la Constitución, los derechos humanos y esas cosas... Entonces, aquí llega mi pregunta.
¿POR QUÉ COÑO HAY TANTA GENTE EN CONTRA?
Supongo que porque si todos somos iguales, la Iglesia no podrá decir a nadie que va a ir al infierno por ser diferente. Y porque si el PP estuviera a favor, perdería el apoyo de los sectores más fundamentalistas de esa Iglesia. Es así de simple.
Entonces, me acuerdo de las clases de Religión de mi infancia, cuando una profesora me decía que el mensaje cristiano era de igualdad. Y recuerdo también una frase que viene en el Evangelio: "Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios". O dicho de otro modo, que no hay que mezclar las cuestiones religiosas con la política. Que siempre que se han mezclado, la cosa ha ido muy mal.
P. D.: Este texto sólo es para quitar el mono a algunos de mis lectores. Todavía tardaré un tiempo en volver a escribir de manera regular. Hasta entonces, lo que decía hace unas semanas: "portaos bien y no hagáis nada que yo no haría".

viernes, junio 15, 2007

Hasta pronto



Fechas señaladas y respuestas en el viento

Hoy me gustaría referirme brevemente a dos temas muy diferentes entre sí. El primero es evidente: Hoy hace treinta años que se celebraron las primeras elecciones libres y democráticas en España después de la dictadura. El momento en el que se cumplieron los deseos de gritar de todos los que habían vivido amordazados durante cuarenta años. El 15 de junio de 1977 es la fecha en la que se inicia la verdadera Historia de la democracia en España.
No hace falta que diga que aquellas elecciones las ganó Adolfo Suárez, franquista arrepentido y demócrata converso (de sabios es rectificar), que se convirtió en el guía de un proceso complicado, pero que, aunque a veces cueste creerlo, salió bien. Durante ese proceso, se aprobó una Constitución y se sobrevivió a amenazas de diversa índole (para muestra un botón: si nos fijamos sólo en el terrorismo, lo hubo de extrema izquierda, de extrema derecha e independentista). Y culminó con un golpe de Estado que no pudo triunfar porque la ciudadanía ya no quería volver al pasado.
Total, que si hoy tenemos algo, ese algo se empezó a gestar hace treinta años.

El segundo tema no tiene absolutamente nada que ver. Me refiero a la concesión del Príncipe de Asturias de las Artes a Robert Zimmermann, más conocido como Bob Dylan. Este tío, aceptable cantante, gran compositor y, sobre todo, espléndido letrista, que tomó su nombre artístico del nombre de su poeta favorito, Dylan Thomas, fue el responsable de algunas de las canciones más maravillosas de la Historia de la música.
Aunque debo reconocer que no me gusta tanto como podría parecer. Más bien al contrario: suelen gustarme más sus canciones cuando las cantan otros. Me gusta más "Like a rolling stone" si la interpretan los Rolling Stones (en este caso era evidente que ellos la cantarían mejor, ¿no os parece?), me gusta más "Knocking on Heaven's door" si la cantan los Guns n' Roses, y me vuelve loco "All along the watchtower" si escucho la versión de Jimi Hendrix. Por cierto, esta versión es la única que está reconocida "oficialmente" como mejor que la original, porque el propio Dylan comenzó a interpretarla en directo con los mismos arreglos de Hendrix. Otra prueba de que los genios de verdad son humildes y reconocen a los que son mejores.
Cojo el viejo vinilo de Bob Dylan que está en casa y trato de preguntarme qué sentirían los que lo escuchaban hace varias décadas mientras deseaban que el mundo cambiara.
La respuesta, amigo mío, está escrita en el viento.

viernes, junio 08, 2007

Hay muchas maneras de morir

Por fin, no voy a escribir sobre política. Ahora que, según la lógica del PP, ante un Gobierno que da a los terroristas todo cuanto piden, éstos vuelven a matar. Ahora que, siempre según la lógica del PP, Zapatero se ha rendido y, precisamente por eso mismo, Otegi y De Juana están en la cárcel, ya no tengo motivos para seguir escribiendo sobre política.
Pero tampoco voy a escribir algo mío. Esta semana quiero copiar algo escrito por otra persona. Por alguien que tampoco escribe de manera profesional pero que, pese a todo, lo hace de maravilla. Me explico:
Como sabéis, suelo escuchar la Cadena Ser, y en su programa Hoy por Hoy proponen cada semana a sus oyentes, en colaboración con www.escueladeescritores.com, un concurso muy interesante. Se trata de que escriban un relato muy breve, de no más de diez o doce líneas, a partir de una frase dejada por algún personaje famoso.
Esta semana, el relato ganador fue escrito por una oyente llamada Patricia Martín López, que escribió un texto magnífico. Por eso decidí que tenía que compartirlo con vosotros. La autora escribió este estupendo relato a partir de una frase de Nativel Preciado ("Hay muchas maneras de morir"):
Hay muchas maneras de morir. La primera vez morirás de pulmonía; eres joven y no conoces el agua. La segunda, por incauto, jugarás con niños y morirás a palos. La tercera, por inexperto, morirás envenenado a manos de tu vecino. La cuarta, por no comer veneno, será de un perdigonazo en la cabeza. La quinta, morirás atropellado en la carretera intentando llegar a algún contenedor. La sexta, morirás en un camión de basura. Pero de todas las maneras de morir, la peor, sin duda, es la séptima.
- ¿Cómo es, papá? - preguntaba el gato joven al viejo.
- Morirás sin más.
- ¿Y por qué es la peor?
- Porque ya lo habrás aprendido todo.
El relato, que podéis leer en este enlace que os dejo junto con otros presentados al concurso, me parece excelente por varios motivos. En primer lugar, porque a partir de una frase aparentemente sencilla, consigue hilvanar una historia de final sorprendente, porque hasta el final no nos damos cuenta de que habla de las siete vidas del gato. Pero sobre todo porque presenta la vida como un aprendizaje constante.
Justo como a mí me parece que debería ser.

sábado, junio 02, 2007

Vivir para ver


Me había prometido a mí mismo que no escribiría tan pronto. También me había prometido que mi próximo texto no hablaría de política en general ni del resultado de las elecciones autonómicas en particular. Pero a veces hay que rendirse a la actualidad y hablar de ella.
Supongo que a estas alturas ya sabréis que Rajoy ofreció a los socialistas navarros un pacto para gobernar juntos esa comunidad. Lo raro no es el hecho en sí, un pacto entre esos dos partidos sería hasta lógico para evitar que los partidarios de ETA (que son menos de lo que quieren hacernos creer, pero bueno) llegaran al Gobierno. Lo raro es que venga del Partido Popular. Y más raro aún es que lo justifiquen diciendo que lo hacen porque ambos partidos defienden el carácter español de Navarra.
Sí, porque llevan varios (bastantes) meses diciéndonos que el PSOE se rinde a ETA y que el Gobierno va a entregar Navarra. Como ejemplo, me remito, entre otros, al discurso que Rajoy pronunció el 10 de marzo para quitar protagonismo al aniversario del trágico atentado del 11 de marzo de 2004. En dicho dicurso, el líder del PP decía cosas como "¿Con quién discute el Gobierno el futuro de Navarra (...)? ¿Con los Navarros? No. (...) ¡Lo discute con Batasuna" (esto es lo bueno de que uno de vosotros tenga un blog para recoger los discursos del barbas).
Las preguntas son: si entonces decía esas cosas, ¿por qué dice esto ahora? ¿Acaso entonces lo decía sólo para atraerse el apoyo de la AVT? ¿Ahora, ante la posibilidad de perder el Gobierno de Navarra, prefiere decir la verdad y dejar de mentir? ¿O seguirá mintiendo y nos dirá que siempre consideró que el PSOE y el PP creían lo mismo sobre Navarra?
Tal vez simplemente debamos considerar que Rajoy es un cínico mentiroso. O que no tiene coherencia. O puede que tengamos que pensar algo mucho más simple: Como el PP no tiene programa, se arrima en cada momento al sol que más calienta. Veremos si le sirve de algo.
Por cierto, la imagen que encabeza este texto es un detalle de una viñeta de Peridis publicada en El País el 30 de mayo (seamos legales y citemos las fuentes).
Cambiando de tema y hablando de cosas más interesantes: Keith Richards sale genial en Piratas del Caribe 3 (y eso que sólo sale tres minutos).

martes, mayo 29, 2007

Dulces derrotas, amargas victorias

Por si alguien no se había enterado, el domingo hubo elecciones autonómicas y municipales. Y, como siempre, todos ganaron y todo sigue igual. Ahora todos se enrollan contándonos que el resultado demuestra que acertaron y que los equivocados son los otros. Y algunos auguran lo que va a pasar el año que viene después de ver lo que pasó anteayer.
Quede claro que me parece una tontería considerar que unas autonómicas pueden darnos idea de por dónde van a ir los tiros de unas generales. Pero ya que todos lo hacen, no quiero perder la oportunidad y me subo al carro yo también.
Si queremos utilizar el resultado de estas elecciones para intuir el resultado de las próximas, lo primero es recordar que, si bien el PP consiguió más votos, el PSOE consiguió más ayuntamientos y más alcaldías, o sea, más poder territorial. Entonces eso nos podría sugerir que dentro de un año Rajoy y sus chicos podrían tener más votos que Zapatero. Pero ¿significaría eso que Rajoy va a ser el próximo presidente?
Yo creo que no. Por varios motivos. En primer lugar, porque el hecho de que haya tenido más votos ahora no significa que los vaya a tener el año que viene. En primer lugar, porque no es igual votar para la alcaldía de tu pueblo que para el Gobierno de la nación. En segundo lugar, porque, no necesariamente todos los que votaron al moderado Gallardón van a votar a Rajoy sabiendo que el exaltado y extremista Acebes va a tener un Ministerio en su hipotético Gobierno.
Y además, porque han tocado las narices a mucha gente. Cuando se insulta al Gobierno, se insulta a más personas. Cuando se miente, se ofende a muchas personas. Cuando se dice que todo voto que no vaya al PP va a ETA, se pierden apoyos. Cuando se dice que haber ganado en Madrid equivale poco menos que a haber conseguido la "joya de la Corona", se molesta a muchos de fuera de Madrid que ya no van a votar a Rajoy.
Por eso, ahora que en España somos tantos etarras y que, según Aznar, está a punto de estallar otra Guerra Civil, Rajoy debería ver qué hace. Podría cambiar de táctica y ser más dialogante, pero entonces perdería el apoyo de la línea más dura de su partido sin que nadie le asegurara que volvería a atraer a los más moderados. O podría seguir con la oposición dura y de derecha sin complejos, pero seguiría sin apoyos. Y entonces sólo podría gobernar si consiguiera una mayoría absoluta, porque ningún otro partido va a querer apoyarlo porque, según Aznar todos los demás partidos apoyan el terrorismo y esos insultos no suelen gustar.
Si creyera que estas elecciones nos dicen qué va a pasar el año que viene, diría que Rajoy debería hacer algo de autocrítica. Pero la autocrítica es difícil cuando se cree que los equivocados son todos los demás.