lunes, mayo 26, 2014

Comentemos las elecciones

Hola a todo el mundo:
Como ya sabréis, ayer fueron las elecciones al Parlamento Europeo. El resultado lo conocemos tod@s, pero creo que lo que deberíamos hacer es reflexionar sobre él con un poco de detenimiento.
En primer lugar, el Partido Popular ganó estas elecciones, de eso no hay duda. Sin embargo, creo que su pérdida de votos es lo bastante importante como para que se planteen la necesidad de llevar a cabo algún tipo de autocrítica que les permita darse cuenta de cuánto están perdiendo por su política.
El Partido Socialista se mantiene como segunda fuerza, pero en este caso su pérdida de votos es tan enorme que podemos considerarla una verdadera debacle, lo que debería llevarles a plantearse una renovación completa, o incluso una total refundación del partido.
Me parece muy interesante el crecimiento de Izquierda Unida y, sobre todo, de Podemos, dos formaciones de izquierdas que pueden dar una respuesta al desencanto de los votantes de ese “lado” del espectro político. En el caso de Podemos, aunque yo no les di mi voto, creo que puede ser una buena alternativa en torno a la que iniciar una verdadera renovación de la política de nuestro país.
Por supuesto, ya hay gente diciendo que el crecimiento de IU y Podemos es el crecimiento de partidos extremistas, cuando, como sabe cualquiera que haya leído sus propuestas, es más bien poco probable que les podamos aplicar el adjetivo de “radicales” o el de “extremistas”.

Pero claro, resulta que estas elecciones eran al Parlamento Europeo, así que habrá que pensar un poco en lo que significa su resultado en Europa.
Y lo más preocupante que yo encuentro del resultado de estas elecciones es el ascenso de la ultraderecha en muchos países importantes de la Unión. En Francia, el Frente Nacional de Marine Le Pen se ha convertido en la primera fuerza política, y lo mismo sucedió en el Reino Unido con el partido UKIP. Pero también entran en el Parlamento Europeo los griegos de Amanecer Dorado, o los ultraderechistas holandeses, alemanes, húngaros y daneses.
En este caso, habría que preguntarse como es posible haya sido este el resultado. Y, sobre todo, como es posible que los partidos socialdemócratas o incluso comunistas hayan perdido el apoyo de la clase trabajadora que en algunos países ha empezado a votar masivamente a la opción populista de una extrema derecha xenófoba y euroescéptica. Encontrar la respuesta a esa pregunta debería ser la principal preocupación de los partidos de izquierda de buena parte del continente (Owen Jones lo explicó muy bien para el caso del Reino Unido en su libro Chavs: La demonización de la clase obrera).
Y es esa entrada de la extrema derecha la que me parece verdaderamente peligrosa, porque se trata de partidos anti-europeístas, así que van a intentar socavar las instituciones de la Unión desde dentro, además de que corremos el riesgo de que busquen la promulgación de leyes xenófobas o incluso contrarias a la libre circulación de ciudadanos por la Unión.
Por todo esto creo que mucho más peligroso el crecimiento de la ultraderecha que el hecho de que vaya al Europarlamento un tío de pelo largo que da clase en la Complutense.

sábado, mayo 24, 2014

Marketing cinematográfico

Ya está, ya lo hice, por fin vi Ocho apellidos vascos. Después de no-sé-cuántas semanas siendo la película más vista, después de ser la película más taquillera de la Historia del cine español, por fin la vi.

Y, la verdad, es una peli divertida, pero no me pareció nada del otro mundo. Sí que lo pasamos bien durante el rato que dura, nos reímos y todo eso. Pero nada más. Es una película entretenida, pero que no se va a estudiar en las Escuelas de Cine. Entonces, ¿por qué ha tenido tanto éxito?
Una posible explicación puede ser que, con tantos problemas que tenemos, de vez en cuando nos hace falta desconectar, y hacerlo con una película divertida puede ser una buena opción.
Pero yo creo que, más bien, es cosa de que la peli en cuestión tuvo una campaña de marketing brutal detrás, orientada a convencernos de que era la película que había que ver este año, y así consiguieron que una peli que no era objetivamente mejor que las demás de la cartelera, fuera la más vista.
Eso sí, durante la hora y media que dura, las risas están aseguradas.
Que no es poco.

miércoles, mayo 21, 2014

Somos políticos

Sí. Aunque a algunos les moleste, los ciudadanos somos políticos. No somos políticos profesionales, claro. Somos profesionales de lo nuestro, y, además, políticos.
Y precisamente por eso, tenemos derecho a participar en el proceso democrático, y no solo con nuestro voto. Porque podemos opinar y criticar. Aunque hay personas a las que les molesta, podemos tener opiniones, y podemos expresarlas, siempre dentro de los marcos de la educación (y, tal como está la cosa últimamente, también de la legislación). Tenemos derecho incluso a manifestarnos cuando nos parece que las decisiones de los políticos no son las más convenientes.
Por eso este domingo tenemos que tomar parte en las elecciones europeas, pero recordando que nuestra actuación no debe limitarse solo a echar un voto en la urna, sino que después, tendremos que ser conscientes de la importancia que tienen las decisiones que se toman en el Parlamento Europeo, y de la responsabilidad que vamos a tener en que unos u otros tengan más o menos peso en ese Parlamento.
Entonces, ejerzamos nuestro derecho al voto de manera consciente y responsable, opinando y ejerciendo una crítica lo más constructiva posible al proceso democrático.
Porque nosotros también tenemos que participar en el sistema, y si no lo hacemos, entonces estaremos dejando que las decisiones las tomen aquellos a los que no hemos elegido.

lunes, mayo 19, 2014

Reflexiones para el Día de Internet… con retraso

Hola a todo el mundo:
Puff… con tantas cosas en la cabeza, se me olvidó que el sábado fue el día de internet. Y claro, una persona como yo, que dedica tanto tiempo a crear contenidos para la red (y, a veces, también a reflexionar sobre el papel mismo de internet en la sociedad), igual debería haber dicho algo. Pero como se me olvidó, pues lo voy a hacer ahora.
Y lo que quiero hacer es contaros qué es internet para mí. En su momento, para un pequeño trabajo académico que tuve que hacer, dije que, desde mi punto de vista, internet es el invento más importante del siglo XX, o por lo menos uno de los más importantes. Y además creo que, por su evolución, será uno de los elementos más relevantes de este siglo XXI en el que estamos inmersos.
Porque internet es hoy mucho más que aquel proyecto militar que era en sus orígenes, e incluso mucho más que la fuente de información más grande que haya conocido la Humanidad. Es un ámbito de expresión, a través de blogs como este mismo, de relación, a través de unas redes sociales que cada vez tienen más peso en nuestra vida, de formación, a través de unas plataformas cada vez más perfeccionadas, de participación… Todo lo que podamos imaginar está en internet.
Y precisamente por eso, debemos ser cada vez más conscientes de que internet puede ser una extensión de nuestra vida, y también que cada vez es más necesario un conocimiento más o menos profundo de las herramientas que nos brinda, para saber utilizarlas de manera efectiva.
O eso creo yo, vaya.

jueves, mayo 15, 2014

Noticias de un asesinato

Hola a todo el mundo:
Supongo que os habréis enterado de que el lunes fue asesinada la presidenta de la Diputación de León, que era del Partido Popular. Pero de lo que a lo mejor no os habéis enterado es de que fue asesinada por motivos personales por otras dos militantes de su propio partido. Porque resulta que esta semana parece que hay mucha gente interesada en que pensemos que esto se debe al “clima político” o a la “animadversión hacia los políticos”.
Pero nada más lejos de la realidad. Este trágico suceso no fue algo político, sino algo personal. No tiene nada que ver con asesinatos como el de Olof Palme y sí con casos como el de Puerto Hurraco.
Pero a pesar de eso, estos días estamos escuchando que esto es solo un paso más en la situación actual, y que se empieza criticando a los políticos y se termina descerrajándoles tres tiros por la espalda. Y es que hay gente muy exagerada.
Y encima, a nuestro Gobierno y a sus palmeros la realidad poco les importa. En una deriva dictatorial con la que parecen querer meternos de lleno en una novela de Orwell, ahora quieren controlar lo que se dice en las redes sociales porque algunos descerebrados dijeron barbaridades sobre la asesinada. Como si la culpa fuera de Twitter y no de las propias asesinas.
Por cierto, una pregunta: Si siendo las asesinas del mismo partido que la asesinada estamos escuchando las tonterías que estamos escuchando, ¿os imagináis lo que tendríamos que escuchar si las asesinas hubieran tenido algo, por poco que fuera, que ver con partidos de izquierdas, sindicatos o movimientos sociales?


P. D.: Por si acaso a alguien no le ha quedado claro, condeno enérgicamente este asesinato y toda clase de violencia. Sé que mis lectores son lo bastante inteligentes como para darse cuenta de ello, pero, tal como está el patio, mejor decirlo. Por si acaso…

sábado, mayo 10, 2014

Que nadie se olvide de votar

Muy buenas a todo el mundo.
Como todos sabemos, estamos en plena campaña electoral. "¿Otra vez?", preguntará alguien. Sí, otra vez. Esta vez para las elecciones al Parlamento Europeo. Y el problema que veo en estas elecciones es que mucha gente no tiene interés por ellas, porque no considera que tengan valor. Pero se equivocan.


Podría volver a recordar ese dato según el cual el setenta por ciento de las leyes que se promulgan vienen marcadas o inspiradas desde Europa. Pero prefiero recordar que los españoles debemos la mayor parte de las infraestructuras que se construyeron durante los años ochenta y noventa se deben a los fondos de cohesión de la Unión Europea. Por lo que, creo yo, deberíamos ser los más europeístas de Europa
Precisamente por eso creo que no podemos dejar que las decisiones de la Unión, que tanto nos afectan, las tomen personas elegidas por solo una pequeña parte del censo electoral. Porque nos jugamos demasiado. 
Por eso no hay que pasar. Hay que informarse, reflexionar y, después, votar en conciencia. Pero votar. 
Y es que, desde mi punto de vista, si no votamos, luego no tendremos autoridad moral para quejarnos de las decisiones que se tomen.
Pues eso.
Que no se os olvide votar.