viernes, noviembre 23, 2012

Elecciones catalanas

Hola a todo el mundo. 
Resulta que el domingo van a ser las elecciones en Cataluña. Y Mas anda dando la brasa con la independencia. Y yo creo que, ahora mismo, ése es el tema menos importante de esas elecciones.
Sí, porque con la cantidad de recortes que está haciendo el Gobierno de la Generalitat (igual de salvajes, injustos e inútiles que los del Gobierno central), lo de marear la perdiz con una Cataluña independiente no es más que una forma de desviar la atención de los ciudadanos de temas más importantes, polémicos y que podrían hacer que la gente no votara a CiU. 
Y es que si Mas y sus chicos no hubiesen empezado a hablar de independencia, la campaña de sus adversarios se centraría en los recortes, y entonces los votantes se darían cuenta de lo que están haciendo. Sin embargo, al sacar a pasear la idea de la independencia, la oposición se tiene que centrar en "desactivar" (o aprovechar, en el caso de Esquerra) esa idea, dejando de lado los recortes, tema que, por otro lado, seguramente el Partido Popular no sabría gestionar bien, ya que desde Madrid están haciendo exactamente lo mismo que CiU en Cataluña.
Y así, con toda la polémica, se pierde el tiempo discutiendo sobre el modelo de Estado, y recordándole a Mas algo que ya sabe pero que obvia por propio interés (que una Cataluña independiente no podría estar ni en el euro ni en la Unión Europea), y nadie habla de los recortes que es lo que, en realidad, más debería preocupar a los ciudadanos.
Pero además, como en el Gobierno central no se dan cuenta de que las cosas que se hacen tienen consecuencias, se empeñan en "españolizar" a los niños catalanes, y, en general, en destilar odio hacia Cataluña (y hacia cualquiera que no piense como ellos), dando así más argumentos a los independentistas.
¿No os parece divertida (y maquiavélica) la política?

jueves, noviembre 22, 2012

De festival otra vez

Muy buenas, camaradas:
El pasado sábado me acerqué hasta el cada vez más polémico y criticado Festival de Cine de Gijón para ver qué nos encontrábamos por allí. Mis colegas me dijeron que la peli que habían visto la noche anterior, la alemana Masks, les había gustado mucho, así que volví a fiarme de su criterio y nos acercamos a ver No quiero dormir sola, película mexicana dirigida por la recién llegada Natalia Beristáin, que venía de ganar varios premios en otros festivales.
Esta peli, que alguien un poco pedante podría calificar de "drama costumbrista" (esperad, éste es mi blog, puedo decir lo que quiera, así que me sumo a lo de "drama costumbrista"), nos cuenta la historia de Amanda, una chica que, para poder dormir, necesita tener a alguien a su lado, pero cuya vida se ve trastocada cuando se ve obligada a hacerse cargo de su abuela, Dolores, una actriz retirada con demencia senil y que necesita del alcohol para poder sobrellevar la vida.
La relación que se establece entre estas dos mujeres se convierte de esta manera en la trama principal de la película, una trama que se desarrolla con demasiada lentitud, a pesar de que se trata de una peli bastante corta (no llega a la hora y media).
Personalmente, no la recordaré como una de las mejores películas que vi en el Festival (tal vez, las que más me gustó a lo largo de estos años fuera The Future, de la que os hablé hace un año, o la francesa Des poupeés et des anges, que la vimos hace ya cuatro), pero se deja ver. Eso sí, os advierto que si no os gustan las películas lentas, ésta os va a parecer un rollazo.
Y a quien la vea: Estad atentos al final, que se os puede pasar por alto el final de la historia.
Nos vemos.

sábado, noviembre 17, 2012

A la huelga

Hola a todo el mundo:
Por mucho que esta semana haya habido bastantes noticias de interés, la más relevante sigue siendo la huelga del miércoles. Y como siempre, pues nos encontramos con valoraciones diferentes. Unos nos dicen que fue un fracaso y otros que fue un éxito. Todo depende del medio de comunicación que leamos. Algunos hasta se olvidan de que hubo movilizaciones en otros países.
Ya antes de la huelga nos decían que no era oportuna, que no era el momento de hacerla o que perjudicaba la imagen del país. La verdad, yo creo que era el mejor momento. Lo que no creo es que hiciera falta hacer una huelga en tiempo de bonanza.
Luego, mucha gente decía que no hacía huelga porque la convocaban los sindicatos (¡!). Cuando alguien me decía esto, yo contestaba que seguramente molaría más que la convocaran Messi y Cristiano, pero que no se ponían de acuerdo con la fecha. Ahora en serio, si algún día el mundo tuviera la mala suerte de que yo me reprodujera y mis hijos me preguntaran qué hacía yo cuando nos robaban el futuro, creo que me sentiría mejor diciendo que estaba protestando que diciendo que no protestaba porque estaba demasiado ocupado criticando a los sindicatos.
Y ahora, fijémonos en las cifras:
Sí es cierto que el seguimiento de la huelga es difícil de cuantificar, porque no hay estándares claros. Se usa mucho el del consumo eléctrico, pero eso no es muy fiable, sobre todo porque si alguien aprovecha que está en casa para cocinar a gusto y enciende el horno, seguramente consumirá más electricidad que si hubiera ido a trabajar y hubiera encendido el ordenador. Además, se dice que en ciertas ciudades se encendieron las farolas de día para “equilibrar” ese consumo, con lo que las cifras estarían falseadas.
Mucho se habla sobre que los piquetes obligaban a ciertos negocios a cerrar. Puede que en algunos casos sea verdad, y de hecho yo tuve la oportunidad de ver alguno de ellos con mis propios ojos. Pero no se habla tanto de esos empresarios que amenazan a sus trabajadores si van a la huelga, que, según el CIS, harían que hubiera el doble de gente que no hace huelga porque le obligan a trabajar que gente que la hace porque le obligan a cerrar.
Y luego están los datos estúpidos. Que si con lo que se perdió durante el día de huelga se podrían evitar el 80% de los desahucios, dijo alguien. Claro, que eso sería así si el Producto Interior Bruto de nuestro país fuera del doble de lo que tenemos. Y lo dijo uno de los que aseguraba que la huelga había sido un fracaso. No quiero ni pensar lo que habría pasado si hubiera sido un éxito…
O lo que descuentan del sueldo a cada persona que hace huelga. Que digo yo que si por cada día trabajado se cobrara lo mismo que se descuenta por día de huelga, vaya sueldazos que tendría la gente…
Y después estuvieron las manifestaciones. Y ahí hay que pensar que mucha gente no haría huelga, pero iría a la manifestación. En Madrid nos decían que había 35.000 personas manifestándose. Justo en el mismo sitio en el que decían en la anterior huelga había 60.000 o donde decían que durante las manifestaciones del Foro de la Familia había más de un millón. A la Delegada del Gobierno de Madrid: Si vas a mentir, que no se note tanto. Que hasta la CEOE reconoció que en la manifestación había un número de personas muy elevado.
Pero lo verdaderamente relevante de la huelga y las manifestaciones no es si hubo más o menos gente, o si tuvieron mayor o menor seguimiento. Lo que verdaderamente importa es que se hicieron porque fue necesario hacerlas, porque era necesario un medio para canalizar el descontento de una población cada día más asfixiada por la política errática de un Gobierno superado por las circunstancias. Porque sí, fue una huelga política, como políticas son las medidas que la provocaron.

viernes, noviembre 09, 2012

Una buena noticia

Hola a tod@s:
Por fin una buena noticia desde que cambió el Gobierno, aunque sea para quitarle la razón al partido que gobierna: el Tribunal Constitucional ha desestimado finalmente el recurso del Partido Popular contra el matrimonio homosexual.
A pesar a de la campaña de ciertos políticos contra ese tipo de matrimonio, a pesar del odio contra los homosexuales que destilan muchos tertulianos de los medios de ultraderecha, y a pesar de que la Conferencia Episcopal también está en contra, está bien que se reconozca que amar no es inconstitucional.
Ahora, como se dijo el otro día en El País, es un buen momento para que la gente del PP reflexione y se dé cuenta de que la sociedad avanza, y de que hay muchos tipos de familia, que no podemos despreciar al que no es igual a nosotros y que todas las opciones, mientras no hagan daño a los demás, son respetables.
Y que los derechos, deberían ser para todos.

jueves, noviembre 08, 2012

(Ir)Responsabilidad

Hola a todo el mundo:
La noticia de la semana pasada fue el trágico final de una fiesta de Halloween en Madrid, cuando después de una avalancha varias chicas fueron aplastadas. Como todos sabemos, tres murieron en ese momento, otra más murió en el hospital, y otra sigue en estado muy grave.
Desde ese día se fueron haciendo conjeturas sobre por qué pasó eso y cuáles fueron los (muchos) errores cometidos. Que si el edificio, el Madrid Arena, no cumplía con la normativa de seguridad. Que si había menores. Que si se habían vendido más entradas de las debidas (ahora se habla de casi el doble del aforo permitido).
Pero lo que más me preocupa es la actitud de las autoridades, que se van de fin de semana en plena crisis, o que dicen que todo es culpa de la falta de valores de las familias (¡¡!!), o que quieren prohibir este tipo de eventos en edificios públicos (eso sí, si la gente muere en festejos taurinos, a  nadie se le ocurre prohibirlos). O que, en definitiva, no asumen las responsabilidades derivadas de que el se diera ese uso a ese edificio y no se pusieran los medios para hacer que dicho uso fuera seguro.
Que el organizador tiene responsabilidades penales por su mala gestión del evento está claro. Que alguien tiene que asumir responsabilidades políticas por no controlar cómo se estaba haciendo todo también debería estar claro. Que para muchos políticos de este país, “dimitir” parece ser el nombre de un mafioso ruso, también.