Más elecciones

Cuando hace un par de semanas desde las Elecciones Generales de este año y cuando ya estamos metidos de lleno en la campaña de las Elecciones Municipales, Autonómicas y Europeas, por fin tengo un rato para comentar lo que se me pasa por la cabeza sobre el resultado de las Generales.

Los resultados de las elecciones, ya lo sabéis, supusieron que Pedro Sánchez sigue en la Moncloa, que el Partido Popular se hunde y que ha entrado Vox en las instituciones. Pues de todo esto, yo creo que podemos sacar dos conclusiones:

En primer lugar, que, si bien la derecha acostumbra a votar, la izquierda es más propensa a la abstención en momentos de desencanto. Y al revés, normalmente cuando la participación es elevada, esos votos suelen ir a la izquiera, y precisamente por eso, la participación tan elevada en estos comicios llevó a que el Partido Socialista fuera el más votado y Pedro Sánchez el Presidente. 

Pero la segunda conclusión es que, si bien Vox ha entrado en el Congreso, su papel no es comparable al de otros partidos de ultraderecha de Europa, como el Partido Nacional Británico. En efecto, mientras que, como explicaba Owen Jones en Chavs, este partido lleva a cabo su actividad de proselitismo en los barrios populares y se presenta como un garante de los derechos de los trabajadores después de que en época de Thatcher el sindicalismo quedara desmantelado y el Partido Comunista perdiera importancia, en nuestro país Vox sigue siendo un partido que representa los intereses de la gente de dinero, y por eso todavía presenta un crecimiento escaso entre las clases trabajadoras en comparación con lo que se ve en otros países. Precisamente por eso, los mejores resultados de Vox se han obtenido en barrios adinerados. 

Pero todavía podemos sacar otra conclusión del resultado de estas elecciones, y es que todavía hay que seguir trabajando y luchando. Ahora hay un partido anticonstitucional y abiertamente antidemocrático en el Congreso y tenemos que asumir nuestra responsabilidad como ciudadanos conscientes para evitar que tengan peso en los ayuntamientos y gobiernos autonómicos y voz en Europa. Si somos capaces de evitarlo, evitaremos que puedan llegar a hacer daño a nuestra democracia.