Hola a todo el
mundo:
Como ya sabréis,
ayer fueron las elecciones al Parlamento Europeo. El resultado lo
conocemos tod@s, pero creo que lo que deberíamos hacer es
reflexionar sobre él con un poco de detenimiento.
En primer lugar, el
Partido Popular ganó estas elecciones, de eso no hay duda. Sin
embargo, creo que su pérdida de votos es lo bastante importante como
para que se planteen la necesidad de llevar a cabo algún tipo de
autocrítica que les permita darse cuenta de cuánto están perdiendo
por su política.
El Partido
Socialista se mantiene como segunda fuerza, pero en este caso su
pérdida de votos es tan enorme que podemos considerarla una
verdadera debacle, lo que debería llevarles a plantearse una
renovación completa, o incluso una total refundación del partido.
Me parece muy
interesante el crecimiento de Izquierda Unida y, sobre todo, de
Podemos, dos formaciones de izquierdas que pueden dar una respuesta
al desencanto de los votantes de ese “lado” del espectro
político. En el caso de Podemos, aunque yo no les di mi voto, creo
que puede ser una buena alternativa en torno a la que iniciar una
verdadera renovación de la política de nuestro país.
Por supuesto, ya hay
gente diciendo que el crecimiento de IU y Podemos es el crecimiento
de partidos extremistas, cuando, como sabe cualquiera que haya leído
sus propuestas, es más bien poco probable que les podamos aplicar el
adjetivo de “radicales” o el de “extremistas”.
Pero claro, resulta
que estas elecciones eran al Parlamento Europeo, así que habrá que
pensar un poco en lo que significa su resultado en Europa.
Y lo más
preocupante que yo encuentro del resultado de estas elecciones es el ascenso de la ultraderecha en muchos países importantes de la Unión.
En Francia, el Frente Nacional de Marine Le Pen se ha convertido en
la primera fuerza política, y lo mismo sucedió en el Reino Unido
con el partido UKIP. Pero también entran en el Parlamento Europeo
los griegos de Amanecer Dorado, o los ultraderechistas holandeses,
alemanes, húngaros y daneses.
En este caso, habría
que preguntarse como es posible haya sido este el resultado. Y, sobre
todo, como es posible que los partidos socialdemócratas o incluso
comunistas hayan perdido el apoyo de la clase trabajadora que en
algunos países ha empezado a votar masivamente a la opción
populista de una extrema derecha xenófoba y euroescéptica.
Encontrar la respuesta a esa pregunta debería ser la principal
preocupación de los partidos de izquierda de buena parte del
continente (Owen Jones lo explicó muy bien para el caso del Reino
Unido en su libro Chavs: La demonización de la clase obrera).
Y es esa entrada de la extrema derecha la que me parece verdaderamente peligrosa, porque
se trata de partidos anti-europeístas, así que van a intentar
socavar las instituciones de la Unión desde dentro, además de que
corremos el riesgo de que busquen la promulgación de leyes xenófobas
o incluso contrarias a la libre circulación de ciudadanos por la
Unión.
Por todo esto creo
que mucho más peligroso el crecimiento de la ultraderecha que el
hecho de que vaya al Europarlamento un tío de pelo largo que da
clase en la Complutense.
2 comentarios:
Hola Pablo,
La verdad que mucho de qué hablar con estas elecciones a las que nunca se les suele hacer mucho caso.
De Europa, poco que añadir a lo que comentas.
De España, en mi opinión, lo sorprendente es que todavía exista tanta gente que siga confiando su voto a partidos que, no sólo no logran realizar una gestión eficiente y eficaz, sino que además y sobre todo están bajo la sombra de la corrupción. No hay nada más grave a mi parecer. Así que nada más que por esto, deberían sentirse bastante contentos, porque a pesar de los pesares siguen en primera línea. Hablo obviamente del nº1 y del nº2, los que siempre se alternan en el poder.
Lo que sí es extremo es la situación en la que está el país y la vida de muchísima gente. Así que poco puede sorprender que el desencanto o la hartura lleven al resurgimiento de otras opciones políticas, gusten más o menos. Yo creo que la estrategia ha sido la de castigar a los apoltronados. De hecho, siempre dicen lo mismo: a manifestarse a las urnas. Pues he ahí.
Yo tampoco he votado a Podemos, pero me alegro que estos 5 diputados tengan voz en el Parlamento Europeo. De eso se trata, de que estén más aportando nuevas ideas y debates, todo mucho más enriquecedor. Se habla de que con estos resultados transmitimos cierta inestabilidad política. Es lamentable, pero es que es la realidad, no sé quién puede pensar que existe estabilidad con los juzgados a tope de trabajo por delitos de robo de dinero público.
Un saludo
Hola, siempre es un placer tenerte por aquí.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, porque me parece que lo interesante de estas elecciones, a nivel de nuestro país, es que la pérdida de votos de los dos grandes partidos deja muy claro el desencanto y esa intención que tú señalas de castigar a los apoltronados.
También estoy de acuerdo en lo que dices de que es bueno que Podemos haya llegado al Parlamento Europeo, porque aportarán nuevas ideas y nuevos puntos de vista que enriquecerán el debate.
Un saludo.
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